La exportación de limones valencianos desciende un 20% por la competencia de la producción argentina

Las exportaciones de limones valencianos han registrado un notable descenso en los mercados europeos, cifrado en un 20%, debido a la fuerte competencia de los productores argentinos. Esa misma invasión de cítricos argentinos ha provocado una caída de los precios del limón valenciano de hasta el 15%. Según el representante de las cooperativas valencianas en la Asociación Interprofesional de Limón y Pomelo (Ailimpo), Manuel Caselles, la cosecha del limón de la variedad Verna, que se recolecta en primavera y verano, se ha visto desplazada en los países europeos, entre ellos Rusia, Polonia, Alemania y Suiza, por la entrada masiva del limón argentino, de similar precio al español y de mayor calidad al pertenecer a la variedad fino. Ésta se comercializa mejor porque se trata de un producto más uniforme y con más zumo. "Ahora es invierno en Argentina y contra esa circunstancia nada podemos hacer los productores valencianos", señala Caselles. La caída de las exportaciones limoneras a los países europeos está siendo compensada con el mercado de Estados Unidos, donde han crecido los envíos de grandes partidas gracias a la helada que sufrió este país, que asoló gran parte de su cosecha limonera. "Esta situación ha contribuido a salvar en parte la venta de limón español en los mercados exteriores, que pese a todo ha bajado un 20% respecto al año anterior", subrayó Caselles, quien añadió que otro de los destinos de los limones valencianos son los mercados asiáticos. El representante de Ailimpo indicó que la entrada de limones argentinos a los mercados europeos se viene produciendo desde hace unos años, aunque no afectaban tanto a las exportaciones españolas, por la mejor red de comercialización de productores valencianos. "Argentina está mejorando sus infraestructuras y servicios lo que facilita su entrada en los mercados europeos", afirmó Caselles. Los agricultores valencianos están notando los efectos de la merma de las exportaciones en una paulatina caída de los precios, que han pasado de las 60 pesetas por kilo al principio de la campaña a las 40 actuales, según la calidad.