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CUMBRE DE BERLÍN

PSOE e IU creen que España sufre "una derrota económica y política"

Anabel Díez

Los socios nacionalistas del Gobierno del PP fueron los únicos que compartieron, aunque con moderación, la alegría del jefe del Ejecutivo, José María Aznar, por los resultados de la cumbre de Berlín. El PSOE e Izquierda Unida no ven motivo alguno para la satisfacción, ya que, a su juicio, cuando se evalúen las cifras se convendrá en que ha habido un retroceso respecto a la situación anterior. "España ha sufrido una derrota económica y política, y ya podemos adelantar que se han perdido 200.000 millones al año", afirmó el candidato socialista a la presidencia del Gobierno, José Borrell.Los equipos económicos del PSOE, dirigidos por su responsable, Juan Manuel Eguiagaray, se pusieron ayer a la tarea de analizar los resultados de la cumbre para ofrecer a primera hora de la tarde su versión. Antes, el secretario general, Joaquín Almunia, en Madrid, y José Borrell, en Barcelona, se adelantaron para echar un jarro de agua fría a la satisfacción gubernamental. "Ha habido una derrota política y económica, y cuando el Gobierno cuente la verdad se verá que, aunque han aumentado los porcentajes, han disminuido las cantidades de tal manera que la pérdida supondrá 200.000 millones al año", subrayó Borrell. Para Almunia, lo ocurrido no es fruto de lo sucedido durante 48 horas en Berlín, sino que se debe "a la falta de una política europea; a la falta de alianzas en Europa, y a la falta de una estrategia clara que viene ocurriendo en estos tres años de gobierno del señor Aznar".

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A primera hora de la tarde, el responsable de economía del PSOE estructuraba en dos folios la posición de su partido. "El acuerdo supone una disminución en las rentas agrarias, un retroceso en la cohesión europea y recortes en los fondos estructurales". El acuerdo de Berlín "significa una clara ruptura de la política de cohesión pactada en Edimburgo", señaló este responsable político, en alusión al Fondo de Cohesión conseguido en 1992 por Felipe González en la cumbre de la ciudad escocesa.

El esfuerzo financiero por conseguir el acuerdo "ha recaído sobre España e Italia, aunque a esta última se la ha compensado con el nombramiento de Romano Prodi para la presidencia de la Comisión", continúa Eguiagaray. "Este esfuerzo contrasta con el que no han tenido que hacer países como el Reino Unido, Francia, Bélgica y Dinamarca, y con la mejora relativa de la posición de los países que pedían compensaciones, como Alemania, Holanda, Suecia y Austria", señala el PSOE.

El acuerdo agrícola, dicen los socialistas, supone "la desautorización de los ministros de Agricultura por parte del Consejo Europeo". Las mejoras cuantitativas en leche y cultivos herbáceos son a cambio de caídas de precios y ayudas. "El coste para España se calcula en una cifra de menores rentas agrícolas superior a los 100.000 millones de pesetas al año sobre las cifras de 1999". Las pérdidas en fondos estructurales suman otros 100.000 millones, siempre según el cálculo de los socialistas.

La opinión de Izquierda Unida será expuesta con detalle el próximo martes en el pleno extraordinario que el Congreso celebrará para debatir los resultados de la cumbre, aunque ayer su coordinador general, Julio Anguita, resaltó "la pérdida de recursos de todos los capítulos; muy por debajo de los que preveía la Comisión". Los nacionalistas catalanes, por el contrario, consideraron positivo el acuerdo por sus contenidos. El cabeza de lista al Parlamento Europeo por esa coalición, Pere Esteve, consideró que el acuerdo es especialmente bueno para España porque será previsiblemente la última vez que es receptor, "ya que después del 2006 deberá estar entre los países de renta mediana".

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Sobre la firma

Anabel Díez
Es informadora política y parlamentaria en EL PAÍS desde hace tres décadas, con un paso previo en Radio El País. Es premio Carandell y Josefina Carabias a la cronista parlamentaria que otorgan el Senado y el Congreso, respectivamente. Es presidenta de Asociación de Periodistas Parlamentarios (APP).

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