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La Confederación Hidrográfica del Guadalquivir avala el uso del nuevo depósito de residuos de Boliden

Alejandro Bolaños

La Confederación Hidrográfica del Guadalquivir (CHG) también ha dado su visto bueno al depósito propuesto por la empresa Boliden para sustituir a la balsa minera, cuya rotura provocó el vertido tóxico en el río Guadiamar, el pasado 25 de abril. La Confederación, en un informe que remitió hace una semana a la Consejería de Industria, considera "viable" la utilización de la mina abandonada de Aznalcóllar "hasta la cota 0 (el nivel del mar)", tal y como aconsejaba el Instituto Técnico Geominero de España (ITGE).El consejero andaluz de Industria, Guillermo Gutiérrez, sostuvo ayer que "con esto se disipan las dudas" sobre la reapertura de la mina para al menos los tres primeros años de actividad.

La propuesta de la empresa propietaria de las minas de Aznalcóllar era utilizar la corta abandonada -en la que se han almacenado ya los lodos tóxicos recogidos del cauce del Guadiamar-, hasta la cota 38 (metros sobre el nivel del mar), para depositar los residuos generados por la extracción de cobre y cinc del nuevo yacimiento de Los Frailes. Boliden prevé que el filón estará agotado en diez años.

En todo caso, la reapertura de la explotación minera deberá esperar al dictamen de la Consejería de Medio Ambiente sobre el impacto ambiental de la corta abandonada que la Consejería tendrá preparado en tres semanas. "La posición política de la Junta de Andalucía es hacer la reapertura de la mina lo antes posible", subrayó Gutiérrez. Esa autorización no sólo estará pendiente del estudio de impacto ambiental. "Por decisión política, que no jurídica, esperaremos a un nuevo informe del Patronato del Parque Nacional de Doñana", indicó el consejero.

El Patronato, presidido por la ministra de Medio Ambiente, Isabel Tocino, ya dictaminó en una primera ocasión contra el proyecto de Boliden, entre otros motivos porque los informes del ITGE y la CHG aún no estaban elaborados.

Gutiérrez ha remitido los documentos al órgano gestor del Parque Nacional de Doñana para que, "si lo tiene a bien", se vuelva a pronunciar sobre la reapertura. Sin embargo, y como recordó el consejero, este informe "no será vinculante". El consejero de Industria también recordó que Boliden tendrá que tener el permiso de la Confederación para verter aguas, previamente depuradas, al río Agrio, tal y como hacía antes del vertido.

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