Retraso en la denuncia contra Ikasle Abertzaleak

Dos semanas después de que un grupo de radicales reventara el claustro de la Universidad y zarandeara al rector, la UPV aún no ha puesto en marcha el mecanismo para sancionar a los alborotadores. Parece seguro que se cumplirá un mes desde los incidentes para cuando el Rectorado presente oficialmente la denuncia. Salaburu dijo que espera que "antes de dos semanas" esté decidido qué camino seguir, el interno o el externo a la Universidad, contra los miembros de Ikasle Abertzaleak, asociación estudiantil del entorno del autodenominado Movimiento Vasco de Liberación Nacional (MLNV). Un portavoz de la UPV aseguró que aún se incluye entre las posibilidades trasladar el asunto fuera de la Universidad, a los tribunales ordinarios. Otra de las opciones es llevar el caso a la comisión disciplinaria de la UPV. El Consejo de Estudiantes, el órgano elegido por el alumnado para que le represente, apuntó una tercera posibilidad: que los universitarios que participaron en la protesta sean denunciados ante la comisión interna y los que son ajenos a la institución educativa sean llevados ante la Justicia. Salaburu insistió en la gravedad de lo ocurrido el pasado 22 de abril en el aula magna de Leioa. Unos 50 jóvenes de Ikasle Abertzaleak interrumpieron una reunión del claustro, máximo órgano de representación de la UPV, a golpe de proclama en demanda de una enseñanza universitaria íntegra en euskera, se subieron al escenario armados de pancartas y, cuando el rector trató de arrebatarles una de ellas, se produjo un forcejeo entre varios de ellos y el máximo responsable de la Universidad pública vasca. La vergüenza del rector "Me llena un poco de vergüenza que dos se dirigiesen a mí en castellano". Salaburu, vascoparlante y cuya mesa de trabajo está presidida por un cartel que dice Hemen ere euskaraz (Aquí también en euskera), reveló este detalle del incidente, que pone de relieve que quizá la defensa del euskera no era la esencia de la llamativa protesta. El rector insistió en que "nadie se puede quejar de que no se le haya escuchado". El vicerrector de Euskera, Juan Ignacio Pérez, se reunió hace una semana junto a su homóloga de Profesorado, Miren Azkarate, con una veintena de estudiantes de las ramas de euskera en cumplimiento de un compromiso alcanzado con los radicales. Fuentes de la UPV insistieron en que estos estudiantes, que no son representantes legítimos de los alumnos, tendrán voz, pero no voto, en lo que atañe a la normalización del euskera.