EE UU alertó a Franco sobre el origen ilegal del oro que compró a Hitler

Siete meses antes de que terminara la II Guerra Mundial, el Gobierno de Estados Unidos, alertó a España sobre la procedencia ilegítima del oro que vendían los nazis y pidió colaboración activa para su localización, pero el Gobierno de Francisco Franco respondió con el silencio por razones denominadas "de coyuntura política", según señala un documento interno del Ministerio, de Asuntos Exteriores español fechado en 1947 al que ha tenido acceso EL PAÍS.

La carta, de dos folios, escrita a máquina y fechada el 16 de julio de 1947, la dirige el director general de Política Económica a Emilio de Navascués y Ruiz de Velasco, subsecretario de Economía Exterior y Comercio, y en la misma se informa sobre la postura de España ante la Declaración. Internacional sobre el oro, a la que se había adherido. El documento se encuentra en el Archivo General de Exteriores, donde ha podido ser consultado.Después de describir las distintas normativas acordadas por las Naciones Unidas para restituir el oro robado por los nazis a sus. legítimos propietarios, el documento se refiere a una nota enviada al Gobierno español por la Embajada de Estados Unidos en Madrid en la que sé alerta sobre la procedencia del oro robado por las tropas de HitIer y se pide su colaboración.

Producto del saqueo

Independientemente de los instrumentos que se resumen, juzgamos de interés hacer mención de la nota número 3.334, de fecha 6 de noviembre de 1944, de la Embajada de los Estados Unidos, es decir siete meses antes del fin de la guerra, y en la que se dice que en Washington existía la certidumbre de que las reservas alemanas de oro fueron consumidas al principio de la guerra y que, por lo tanto, el oro que en aquel momento poseía el Eje era producto del saqueo", dice la carta.

Y el documento continúa:

"Siguiendo el espíritu de la declaración de 5 de enero de 1943 [Declaración de las Naciones Unidas sobre el oro], solicita del Gobierno español: 1º) que entre en relación o admita depósitos del Eje, [países] satélites u ocupados; 2º) que no permita su importación en concepto de depósito en puerto franco. Esta nota, sin duda por la coyuntura política, no fue, al parecer, contestada".

La afirmación del director general de Política Económica del Ministerio de Asuntos Exteriores sobre el silencio de España a la advertencia de EE UU, demuestra, una vez más, que el Gobierno del dictador apostó por la posible victoria nazi hasta el final de la guerra. Pero su postura cambió radicalmente cuando Hitler perdió la contienda. A partir de entonces, Franco colaboró activamente con los Aliados. No obstante, la advertencia de Estados Unidos a España llegó tarde. Según consta en documentos del Archivo General de Exteriores consultados por este periódico, las compras de oro a Suiza por parte de España se llevaron a cabo durante los años 1942 y 1943. Los permisos para su traslado fueron tramitados por los ministros de Exteriores Ramón Serrano Suñer y Francisco. Gómez Jordana.

La carta recuerda que el 28 de octubre de 1946 el Ministerio de Exteriores español reconoció al Comité Aliado de Control (integrado por Estados Unidos, Francia y Reino Unido), "cuya competencia se extiende también al problema del oro procedente de los países del Eje".

Asimismo, informa que el 10 de julio de 1945 se comunicó a la Embajada norteamericana "haberse cursado órdenes del Instituto Español de Moneda Extranjera (IEME) para ingresar, entre otros valores, en la British and American Embassies Joint Trust Account del Anglo South American Bank, cierta -cantidad de oro amonedado- procedente de la Embajada de Alemania".

Ocho lingotes

El documentó informa también de la devolución que el 13 de diciembre de 1945 efectuó el IEME al Comité Aliado de Control de 115.645 libras de oro procedentes también de la Embajada alemana. Además, de estas pequeñas cantidades, España devolvió a los Aliados, el 3 de noviembre de 1948 ocho lingotes de oro nazi, de 110 kilos de peso, según consta en documentos del Archivo Histórico del Banco de España consultados por este diario.

El Comité Aliado de Control de Alemania en España examinó y fiscalizó después de la guerra todas las compras de oro efectuadas por España. Y obligó a devolver algunas partidas, cuyo origen era ilegal según la resolución VI de Bretton Woods, a la que España también se había adherido. En 1955 los alemanes reclamaron a España dos toneladas de oro que, según su testimonio, tenían en su Embajada en Madrid.