El Gobierno cede a las peticiones del PNV en el concierto económico

El Gobierno cede y el PNV logra sus pretensiones para renovar el concierto que fija las relaciones financieras entre la Administración central y la autonómica. Con la nueva fórmula, el Gobierno vasco consigue un gran aumento de su capacidad recaudatoria. Economía aseguró ayer que el efecto será nulo. Sin embargo, y sólo por la concertación de impuestos especiales, los vascos aumentarán su capacidad recaudatoria en al menos 110.000 millones. El presidente José María Aznar intervino para alcanzar el acuerdo y consiguió así el apoyo del PNV a los Presupuestos.

Doce horas seguidas de negociación se necesitaron para cerrar, al filo del límite impuesto por la votación de las enmiendas a los Presupuestos, la renovación del concierto. La fórmula pactada en abril y precisada en la negociación de ayer supondrá para el País Vasco su equiparación en capacidad normativa sobre el IRPF a la que dispone el convenio de Navarra; la tributación de los no residentes a la Hacienda vasca y, sobre todo, la introducción de los impuestos especiales (tabacos, alcohol e hidrocarburos) en el sistema vasco, del que estaban hasta ahora exentos por ser monopolios del Estado.Hacienda dice que el efecto Financiero será nulo, pero, según algunos expertos, la concertación de los impuestos especiales aumenta la capacidad recaudatoria vasca entre 110.000 y 130.000 millones de pesetas en cifras de 1995.

El pacto con el PNV sobre el concierto permitió a Aznar revalidar la confianza que los grupos le prestaron para ser investido presidente del Gobierno. La que es considerada como ley más importante durante el año parlamentario, es decir, los Presupuestos Generales, iniciaron ayer su andadura al ser rechazadas las enmiendas de socialistas, IU y Grupo Mixto, que pedían su devolución al Gobierno.

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