El "reajuste de las cuentas del Estado" será la primera tarea del futuro Gobierno del PP

A Partido Popular, tras la formación del Gobierno, encarará una reforma del actual presupuesto del Estado, prorrogado del de 1995, que implicará probablemente una nueva cifra de déficit real. A continuación, abordará la elaboración del Presupuesto para 1997, en el que se impondrá como objetivo ineludible controlar el déficit público en el 3% del Producto Interior Bruto (PIB). Este objetivo se intentará lograr, según fuentes del PP, respetando dos criterios: congelar la presión fiscal en su nivel actual y mantener el gasto en pensiones, incluido un crecimiento similar a la inflación. Las reformas de fondo -una de las primeras será la protección por desempleo-, aunque empezarán a analizarse este año, quedan para 1997.

El Presupuesto será la primera gran tarea del Gobierno de José María Aznar. Una vez formado el nuevo Gabinete, el área económica del PP tiene previsto acometer de inmediato el examen del Presupuesto del Estado para 1996 (que es, como se sabe, el msmo de 1995, prorrogado).Este examen, "que solamente puede hacerse desde dentro de la Administración.", según fuentes autorizadas del PP, "dará como resultado muy probable una modificación de la situación de, las cuentas del Estado. Casi con seguridad", agregan, "cambiarán las cifras de ingresos, la progresión de gastos y el nivel de déficit público".

La desconfianza hacia la fialbilidad de los datos ofrecidos por el Gobierno socialista sobre el estado de las arcas públicas ha sido una constante en las declaraciones públicas de los responsables del PP, quienes han anunciado su propósito de auditar las cuentas del Estado cuando lleguen al Gobierno. No obstante, las fuentes consultadas califican de "absolutamente normal" este ajuste de las cuentas y aseguran que los mercados recibirán las nuevas cifras sin sobresaltos".

Menos ingresos

La elaboración de un nuevo ajuste del Presupuesto se hace, además, inevitable para evaluar y repercutir los efectos que tendrá sobre los ingresos la desaceleración económica que se ha producido en el primer trimestre de este año, en el que se ha registrado un crecimiento económico del 2% del PIB, muy inferior al 3,2% que se alcanzó en el primer trimestre de 1995.

Esta desaceleración del crecimiento acabará por traducirse en un recorte de los ingresos tributarios. En las recientes reuniones que ha mantenido el ministro de Economía en funciones, Pedro Solbes, con Cristóbal Montoro, encargado por el PP de negociar con el Gobierno su propuesta de modificar en más de 100.000 millones de pesetas el actual presupuesto, se manejaron cifras de ingresos en las que todavía no podía apreciarse, por cuestiones de calendario, el efecto de la desaceleración del crecimiento sobre la Hacienda pública.