La supervivencia de enfermos tratados con AZT durante un año fue del 78%.

La supervivencia de un grupo de enfermos de SIDA después de haber sido tratados con zidovudina (antes llamada acidotimidina o AZT) fue del 78% tras un año y del 21% tras 30 meses, el período de tiempo más largo estudiado con esta droga, aprobada para tratar a los enfermos de SIDA en marzo de 1987 en Estados Unidos, Francia y el Reino Unido.

Este resultado, presentrado ayer en Montreal por la doctora Margaret FischI, directora de la unidad de investigación clínica del SIDA en la facultad de medicina de la universidad de Miami, se complementa con la observación de que en un grupo de pacientes que padecía el llamado complejo relacionado con el SIDA (ARC) - una forma menos grave de infección por el virus de la inmunodeficiencia humana (VIH)- la supervivencia en el mismo tiempo fue del 49,1 %. Flschl, en el curso de un simposio previo a la quinta conferencia internacional sobre el SIDA, inaugurada ayer en Montreal, expuso ante 800 especialistas de todo el mundo los resultados de la observación de un grupo de 229 enfermos que han recibido desde enero de 1987 tratamiento con la zidovudina, única droga aprobada por la Food and Drug Administration de los Estados Unidos.El fármaco se usa ahora en 70 países y en más de 7.000 personas. Otro dato facilitado por esta investigadora, fue que después de un año de tratamiento la tasa de supervivencia en el grupo de los enfermos del síndrome fue del 78%, cifra que descendía a los 18 meses -sólo vivía el 61%- y, a los 24 meses (31 %).

Unas 40 drogas para el tratamiento del SIDA se están ensayando en humanos, entre ellas el CD-4 y otros fármacos relacionados con la zidovudina. Otra de las intervenciones del simposio fue la de Douglas Richman, profesor de enfermedades infecciosas en la facultad de medicina de San Diego (California), quien destacó la evidencia de que en la

SIDA, tratados con esta droga durante más de seis meses, se encontraban cepas de virus resistentes a la droga aunque no se demostró una influencia de este hecho en el estado de los pacientes.

La quinta conferencia mundial sobre el SIDA que en los próximos días reunirá a más de 10.000 personas en Montreal, y en la que participaran 5.500 científicos, fue inaugurada ayer con la presencia del primer ministro de Canadá, Brian Mulroney, el presidente de la República de Zambia, Kenneth Kaunda, y el director del programa del SIDA de la ONIS, Jonathan Man. Kaunda, quien perdió un hijo en 1986 por culpa del síndrome, expresó su protesta por el tratamiento de los africanos como "conejillos de indias" para el ensayo de drogas.

Los casos de esta enfermedad registrados por la OMS a finales del pasado de mayo era 157.191, aunque el organismo considera que el número de enfermos en el mundo asciende a 400.000 y que para el año 2000 habrá entre cinco y diez millones de casos.