El País Vasco estará presente en la Bienal de Venecia

El País Vasco estará presente este año en la Bienal de Venecia, si no se tuercen más las cosas, gracias a una iniciativa de los artistas italianos, que han cedido una parte de su pabellón. Hasta el momento no se ha decidido definitivamente cuál será la aportación plástica, pero dada la premura de tiempo, muchos de los integrantes de la Asamblea Vasca constituida de cara a esta Bienal son partidarios de dejar vacía la nave cedida, con una solitaria ikurriña en el centro. De alguna manera -dicen- sería un símbolo de la marginación política y social en que se mantiene a Euskadi.Los miembros de la Asamblea opinan que lo ocurrido con el País Vasco no es sino una muestra más de esa marginación, ya que consideran inaceptable que pueda encontrarse ausente de una muestra que pretende presentarse bajo el título de Cuarenta años de lucha antifascista.

Los problemas de la participación vasca surgieron el pasado mes de marzo, con ocasión de la invitación enviada a Ibarrola, Oteiza y Chillida para que acudiesen a la Bienal dentro del conjunto español. Los dos últimos respondieron señalando que su obra no podía ser entendida fuera, del contexto en que había sido realizada, por lo que estimaban que el País Vasco debía tener una representación propia, dada además su particularísima participación en la lucha contra el fascismo.

En torno a estos dos artistas se forma una comisión que decide negociar directamente con los rectores de la Bienal, dada la falta de respuesta de la comisión española. Los representantes del certamen dan largas a la participación vasca a pesar de que todos los grupos autóctonos vascos -desde el Partido Nacionalista Vasco hasta las dos formaciones de ETA- apoyan a los miembros de la comisión y presentan en el mes de mayo un programa de actuaciones a desarrollar en Venecia.

Con motivo del Encuentro con la oposición democrática española, que se celebra el día 17 dentro del marco de la Bienal de Venecia, tres periodistas vascos constatan que entre los miembros de esta oposición no figura ningún representante vasco y redactan inmediatamente una nota de protesta en la que dicen: «Vemos con extrañeza la ausencia de Euskadi en este acto, lo que nos hace suponer que los organizadores, o bien desconocen la problemática actual del país o no tienen posibilidad de contactar con las fuerzas que operan en el mismo».

Aunque el comunicado no pudo ser leído en el acto, se repartió entre los periodistas asistentes, quienes se interesaron por la ausencia de los vascos. Los rectores de la Bienal excusaron esta ausencia debida a la falta de una alternativa unitaria de la oposición vasca, a lo que se opuso la presencia de dos plataformas catalanas, la Assemblea y el Consell.

En última instancia se reconoció que la Bienal se había puesto en contacto con la Asamblea Democrática de Euskadi y el Gobierno vasco, sin que estas dos instancias se hubieran interesado por la participación. Los miembros de la comisión señalan que la falta de interés de estas dos agrupaciones no es razón suficiente para que se ignore la existencia del pueblo vasco y que en todo caso existe una tercera alternativa, la Koordinadora Abertzale Socialista (KAS), con la que nadie se ha puesto en contacto, pese a agrupar precisamente a aquellos grupos que más han luchado en estos 40 años.

Ante este cúmulo de circunstancias, que a juicio de la comisión vasca hablan claramente de un intento por marginar al País Vasco de la Bienal, han sido los artistas italianos quienes han cedido parte de su pabellón. Aunque la participación concreta se decidirá los próximos días, ya es seguro que los vascos podrán estar presentes en Venecia.