Un primer trimestre heroico, pero con muchas tareas pendientes
La ministra Isabel Celaá considera que las escuelas españolas han aprobado el primer trimestre “con nota” en seguridad covid, aunque 3.000 centros no tienen internet de alta velocidad, la brecha científica es una realidad y la educación ha dejado de ser un ascensor social
Alemania y Países Bajos se suman a Dinamarca y Suecia en el cierre de escuelas, guarderías e institutos hasta el 10 y 19 de enero ante el aumento de contagios. Y todavía sorprende que los gobiernos sigan cerrando escuelas cuando la evidencia demuestra que los niños contagian menos, se infectan menos y sufren menos la covid.
El ministerio de Educación cree que las escuelas españolas han pasado el primer trimestre "con nota". Solo se han cerrado un 2% de las aulas y la ministra asegura que ha sido fruto del esfuerzo, compromiso y responsabilidad de toda la comunidad educativa. Mientras, esta misma semana, en la Comunidad de Madrid confirmaban el despido del millar de docentes contratados para refuerzo covid y contábamos que hay más de 3.000 centros educativos que no disponen de internet de alta velocidad, que los estudiantes españoles cada vez obtienen peores resultados científicos, o que la educación está perdiendo su papel como ascensor social.
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Balance del primer trimestre
En lugar de focos de contagio, como se temía, las escuelas han funcionado como espacios "de detección del virus y control de la pandemia". Este es el balance del primer trimestre realizado por la ministra de Educación, Isabel Celaá. En él recuerda que, de las 380.000 aulas que hay en España, nunca se ha superado el 2% de aulas confinadas. El viernes pasado por ejemplo, el porcentaje se situó en el 0,7%. Y ninguna semana ha habido más de 35 centros educativos cerrados, una cifra que representa el 0,2% del total. En el ministerio creen que las medidas de prevención han funcionado y el esfuerzo de la comunidad educativa ha contribuido a reducir la incidencia.
Incluso podremos sacar algunas lecturas positivas de estos protocolos como contaban en De Mamás y Papás, porque con las medidas anticovid en los colegios se han reducido los casos de bronquiolitis o catarros y la incidencia de piojos en los niños.
Sin embargo, esta situación también deja en evidencia la gestión de algunas regiones. Hace unos días en la Asamblea de Madrid los diputados aprobaron una proposición no de ley para mantener contratados a un millar de profesores de refuerzo covid. "El profesorado de refuerzo covid es imprescindible. Sería preciso que el trabajo de estos profesores continuara". Así de contundente se mostró en una carta a los diputados el presidente de la Asociación de Directores de Madrid, Esteban Álvarez. Sin embargo, la consejería ha optado por despedirlos a pesar de que han sido fundamentales para apoyar a más de 20.000 alumnos y mantener abiertos los centros, sustituyendo las bajas que la administración no llegaba a cubrir. Y los despide la misma comunidad que trasvasó 51,2 millones más a la concertada en el último año.
Un debate educativo viciado
¿De qué hablamos cuando hablamos de educación? Se lo preguntaba Ricardo de Querol en su tribuna en la que plantea cómo se está centrando el debate en torno a los conciertos, la cuestión lingüística o la religión cuando existen cuestiones realmente trascendentes y prioritarias que abordar.
Podríamos hablar de las más de 3.000 escuelas desconectadas que no cuentan con internet de alta velocidad y lo esperan desde que el Gobierno se lo prometió en 2015. O de cómo la brecha científica crece en España: los estudiantes españoles de primaria bajan en Ciencias y aumentan la diferencia con la media de la OCDE y se estancan en Matemáticas, según los resultados del informe TIMSS. También podríamos poner el foco en cómo la brecha social se perpetúa: el 45% de los hijos de padres con estudios básicos se quedan en ese nivel educativo, o en cómo la tasa de abandono escolar temprano en España (17,3%) afecta siete veces más a los niños de familias con menor renta.
Todo ello debe preocuparnos porque la educación ha dejado de ser un ascensor social, como relata en su tribuna Sótano, semisótano, bajo y entresuelo la poetisa, ensayista y editora Elena Medel. Ese concepto "significa lavado de conciencia para el ático e ilusión para conformar a quienes parten del sótano". O como aseguraba la exministra Cristina Garmendia, presidenta de Fundación Cotec, las consecuencias de esta crisis serán determinantes: “La pandemia dejará un retraso en el aprendizaje escolar”.
Pero en lugar de centrar el debate en estos asuntos, estamos hablando de cómo buscar atajos para no cumplir la ley en cinco comunidades autónomas: Casado anuncia que las comunidades del PP adelantarán la matriculación para sortear la ‘ley Celaá’.
Y de las consecuencias demoledoras que todo esto tiene para los estudiantes y que relata Javier Marías en su columna Escenas didácticas de EL PAÍS SEMANAL.
Proyectos y coles a los que mirar
Como cada semana, nos detenemos en las ideas más inspiradoras que hemos contado, como el colegio San Viator de Madrid, que se ha convertido en un generador de energía solar con placas fotovoltaicas en su tejado para abastecer a los ciudadanos de energía 100% sostenible. O la revuelta de las escuelas de Barcelona, donde 17 colegios han cortado el tráfico la semana pasada para pedir menos coches. Y el espaldarazo al ajedrez como herramienta educativa que ha supuesto la serie de Netflix Gambito de dama.
Gracias por haber llegado hasta aquí.
¡Hasta la semana que viene!
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