Tarta de puerros y queso de cabra para Amur y Timur
La turbulenta amistad entre un tigre siberiano y una cabra en un zoo de Vladivostok, ligada a una receta que no tiene mucho que ver pero que está bien buena.
*Este artículo se publicó originalmente en la revista Tentaciones.
Proyectar cualidades humanas en los animales es lo más interesante que se me ocurre hacer con ellos. Me pasa con mi perra, cuando interpreto sus desplantes como una venganza por algo que le he dicho, o con los pingüinos gays de algunos zoos, a los que veo como bravos luchadores contra la discriminación por motivos de orientación sexual.
Este proceso de personificación se ha repetido al conocer la historia de Amur y Timur, un tigre y una cabra que han convivido durante dos meses en un safari park de Vladivostok (Rusia). Timur fue introducida en el territorio del felino para que éste se la zampara, pero el tigre, en un insólito lapsus vegano, la respetó. Por su parte, Timur debió de pensar que Amur era una cabra como ella, un poco rara pero enrollada, y lo aceptó como una colega más.
Los recelos se tornaron pronto en amistad, y faltó poco para que Amur y Timur acabaran haciendo la cuchara en la cama. Pero la cabra no se despegaba del tigre en ningún momento -hasta le quitó su sitio para dormir a cubierto- y a éste se le acabaron hinchando las gónadas. De un mandoble la tiró colina abajo, y los cuidadores del parque decidieron sacarla de allí antes que corriera la sangre.
Leo en el caso una fábula inversa: en vez de ficción con animales humanizados, realidad de animales a los que les pasan cosas muy humanas. Con su lección moral y todo. Amur y Timur nos enseñan que la valentía puede salvarte la vida. Que las personas más distintas a ti pueden convertirse en tus amigos. Que si te pones plasta alguien acabará mandándote a la porra de un zarpazo. Y que, parafraseando a Lola Flores, lo que espera todo el mundo es que te coma el tigre.
Dificultad: Para felinos pusilánimes.
Ingredientes
- 2 patatas cocidas
- 150 g de queso de cabra
- 225 g de puerro picado
- 3 huevos
- 100 ml de nata
- 125 g de yogur griego
- 3 cucharadas de piñones
- 2 cucharadas de mantequilla
- Unos 250 g de masa quebrada o brisa
- Sal y pimienta negra
Instrucciones
Fe de errores: por empanamiento mental del autor, el queso de cabra había desaparecido de esta receta en su primera versión.
¿Has tenido problemas preparando esta receta o cualquier otra de El Comidista? Escribe a la Defensora del Cocinero: defensoracomidista@gmail.com
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