O Esteiro Caíño 2015, cartografía del tinto atlántico
La memoria de la uva tinta gallega, junto con el respeto por el trabajo del paisano, se hace vino en la bodega Albamar.
Xurxo Alba, enólogo, es viajero incansable en una tierra hecha al sol poniente y a las brisas y corrientes atlánticas, en la desembocadura del río Umia. Sus propios viñedos, en zona de navazos ganada al mar, y los de los paisanos que durante siglos han conservado el tesoro de las uvas tintas conforman un mapa único de sabores y sensaciones. La historia del Camino de Santiago vive en ellas: anduvieron hace siglos la ruta de Francia y se afincaron junto al océano, frescas y ácidas, salvajes y, al tiempo, educadas en el silencio y la austeridad. De una de ellas, caíño, hace Xurxo O Esteiro 2015, un vino que es símbolo de intrepidez, de fragancia asilvestrada y de siglos de trabajo y de conocimiento. Infusión de cerezas, violetas de monte, que empieza a paso lento y acaba en trote alegre y montaraz. De esas cepas viejas nacen vinos sabios y sabrosos, transparentes en su verdad y ante la historia que representan.
Ficha técnica
Albamar, O Esteiro, Caíño 2015
DO Rías Baixas, 11,2%. El caíño procede de varios viñedos viejos en emparrado alto, sin labrar ni abonar. Los racimos se despalillan y fermentan a temperatura controlada en acero. Después, cada parcela se afina por separado en madera francesa vieja, hasta el ensamblado final. Mínimos filtrado y sulfitado. Precio: 23,90 euros.
Sensaciones
Acomodo y luz, fluidez en el camino que se abre a un océano de grosellas y de sombras azules. El caballo reposa ya junto al endrinal.
A través del cristal
Sobre una tabla de mármol negra, servilleta de lino, ambas de Luzio. Copas de la serie Salute de Spiegelau.
