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Una pareja canadiense adopta a una cerda como mascota, se la come y lo cuenta en las redes sociales

Uno de los dueños de 'Molly' ha asegurado sentir "remordimiento" por matar al animal

Un cerdo vietnamita en la protectora de animales Alba en Camarma de Esteruelas (Madrid).
Un cerdo vietnamita en la protectora de animales Alba en Camarma de Esteruelas (Madrid). kike para

La cerda Molly encontró un hogar a principios de este año. Una pareja de canadienses la adoptaron y la llevaron a vivir con ellos. Pero solo un mes después, la mataron para comerla en la cena. En Canadá, los animales son considerados una propiedad y, por eso, lo que hizo la pareja no es ilegal. Activistas y usuarios de las redes sociales han repudiado los hechos y han comenzado a juntar firmas para pedir que se endurezca la ley de protección animal del país.

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Molly fue rescatada hace un año junto a otros 57 cerdos vietnamitas por la Sociedad para la Prevención de la Crueldad Animal de British Columbia, en Canadá. Pronto ganó peso y su salud mejoró. El pasado enero, una pareja la adoptó, pero poco después de un mes la mató para comerla. Según la plataforma Animal Justice, la pareja subió a la red social Snapchat —donde el contenido permanece en línea solo 24 horas— vídeos de ellos condimentando la carne del animal mientas la cocinaba. 

"Se necesita un tipo especial de persona para adoptar un animal y llevarlo a casa para matarlo y comerlo", ha escrito en su perfil de Facebook la protectora RASTA. La asociación animalista también ha difundido los mensajes que el dueño de Molly, cuyo usuario de Instagram es @austin_forget, escribió en la red social. En los comentarios, reconoce, entre risas, haber matado al animal y se enfrenta a otros usuarios que reprochan su accionar. "Asumo que eres una vegetariana feminista", le responde a una mujer que le desea "lo peor" por lo que hizo.

It takes a special type of person to adopt an animal from a rescue organization simply to take them home to kill them,...

Gepostet von RASTA Sanctuary am Mittwoch, 21. Februar 2018

Posteriormente, el canadiense compartió un mensaje de Facebook, que luego borró, en el que asegura que no adoptó a Molly con la intención de matarla. El hombre reconoció su "remordimiento y arrepentimiento" y explicó que decidió matar al animal "solo cuando se volvió agresivo". "Por favor, entiendan que soy humano. Reconozco que lo que hice estuvo mal y que no puedo arreglarlo, solo puedo seguir disculpándome", escribió, según recoge el portal Global News.

"Debido a que los animales se consideran propiedad según la ley [canadiense], una vez que se realiza un acuerdo de adopción, esa persona es el propietario legal del animal, ya sea un perro, un gato o un cerdo", ha explicado Lorie Chortyk, gerente general de Relaciones Comunitarias de la Sociedad para la Prevención de la Crueldad Animal de British Columbia a Global News. Por esa razón, la pareja no será sancionada. El hombre sostiene que el enojo de la gente viene del hecho de que no lo sancionaron: "Si pudiera pagar una multa para hacer que las personas se sintieran mejor, lo haría".

En España, los animales dejaron de ser considerados cosas el pasado diciembre y pasaron a ser considerados ser seres vivos, más en concreto “sintientes”, sujetos de derecho. Hasta entonces, en España se consideraba a los animales meras cosas, un "bien mueble", que puede ser embargado a su dueño como si fuera un coche o un piso o ser incluidos en herencias sin otra consideración que su valor monetario.

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