CiU afirma que se avanza en austeridad pero sin crear empleo

Los grupos que en otros momentos de la legislatura ayudaron al Gobierno a sacar adelante leyes o proyectos importantes y que ahora han perdido la etiqueta de "socios preferentes" criticaron las cuentas del Gobierno tanto por los recortes sociales como por su supuesta falta de ambición para crear empleo. Lo hizo toda la izquierda, con extremada dureza; UPyD y también CiU, aunque con otros argumentos.

El portavoz de este grupo, Josep Antoni Duran Lleida, hizo una defensa de principios al reprochar a Mariano Rajoy que presente el acuerdo del Gobierno con el PNV y CC como si de un chantaje se tratara. "No compartimos las críticas, sobre lo que denominan el precio que el pacto implica, que solo se utiliza cuando se pacta con el PNV o con CiU". Duran ironizó al señalar que cuando el PSOE y el PP pactan no hay precio ni venta, sino "pacto de Estado".

Duran Lleida reconoció que las cuentas del Gobierno han ido a mejor en lo que a austeridad se refiere, pero asegura que no servirán para crear empleo porque han recortado la inversión en un 30%, ni para impulsar el crecimiento. El portavoz de CiU puso sobre la mesa, para su toma en consideración, una bonificación a los empresarios de 5.000 euros a fondo perdido, por cada nuevo puesto de trabajo fijo. Así se crearían, según sus cálculos, 150.000 empleos.

Desde la perspectiva catalana, estos Presupuestos solo van a servir para reducir "drásticamente el desajuste de las cuentas públicas, porque el Gobierno participa de la obsesión masoquista de contener el déficit a cualquier precio". Esta es la única función que el portavoz de ERC, Joan Ridao, reconoce a estas cuentas. Lo demás, a su juicio, será negativo. "Ustedes hacen un desguace del Estado de bienestar en este Presupuesto antisocial de un Gobierno empecinado en doblar el espinazo de pensionistas, trabajadores y emprendedores", denunció Ridao.

Muchos electores que votaron al PSOE en las últimas elecciones querrían unirse al rechazo a estos Presupuestos, según interpreta el portavoz de ICV, Joan Herrera, que también en nombre de IU lanzó una durísima diatriba contra el Gobierno.

"Ustedes solo se atreven con pensionistas y con trabajadores, y en absoluto con las eléctricas y las grandes fortunas", clamó Herrera, a punto de abandonar el Congreso de los Diputados para presentarse como cabeza de lista de su formación en las elecciones autonómicas de Cataluña. "Estos son unos Presupuestos resignados", pero tanto ICV como IU pertenecen a una "izquierda que no se resigna, que cree que hay otra salida a la crisis. Ser de izquierdas para ustedes es poner fondo rojo en los mítines", espetó con la mirada fija en la bancada socialista.

De nuevo sacó las recetas fiscales que el Ejecutivo no atiende, como crear un impuesto para las grandes fortunas o el impuesto medioambiental. En su opinión, y en la de Francisco Jorquera (BNG), hay otras formas de enjugar el déficit. "Es clamoroso el malestar en la calle, mientras que ustedes sucumben a los dictados de los mercados", señaló Jorquera. Como quiera que el Gabinete repite que el 58% del Presupuesto se dedica a gasto social, este portavoz remarcó que se lo llevan las pensiones y la cobertura del desempleo, gasto "obligado por ley".

No menos crítica se mostró Rosa Díez (UPyD) que puso el énfasis en denunciar el pacto con el PNV. "Debe ser duro para los socialistas utilizar el dinero de los parados para pagar el alquiler de La Moncloa", sentenció. A su juicio, el Ejecutivo "cede soberanía al nacionalismo vasco". A los votos a favor de devolver los Presupuestos se unirá Uxue Barkos, de Nafarroa Bai, aunque no ha presentado enmienda. Carlos Salvador, de UPN, se abstendrá.