Estalla la guerra del porcino

La nueva gripe está desatando el escenario menos deseable ante la crisis que golpea las economías del planeta: medidas proteccionistas sin ninguna base científica vinculada a la inminente pandemia. La presión social para proteger sus industrias y empleos está en la base de esta carrera por frenar la importación de ganado porcino y sus derivados que han emprendido algunos países, como Rusia, China y algunas naciones latinoamericanas.

México, el más afectado por los vetos impuestos a sus productos, ha acudido a la Organización Mundial del Comercio (OMC) denunciando un bloqueo para el que no hay justificación sanitaria, como han repetido la OMS y la FAO en los últimos días. Rusia no sólo ha prohibido la importación de carne de cerdo procedente de España, México, Canadá y Reino Unido, sino que ha vetado incluso el comercio de pollo y ternera de algunos Estados de EE UU. China también ha vetado el comercio de carne con 38 Estados norteamericanos. A EE UU le cierran las fronteras otros 15 países.

Los ciudadanos mexicanos están sufriendo casos de aislamiento

Muere una mujer en Tejas que además padecía dolencias crónicas

Mientras, España prosigue sus conversaciones con el servicio de Sanidad de Rusia para que anule el veto al porcino español. Y el ministro de Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, habló ayer en Estonia con su homólogo ruso a quien ha comunicado la preocupación por este cierre. Serguei Lavrov le ha respondido que es una medida "preventiva y provisional" a la que no hay que darle mayor alcance político puesto que se trata de algo técnico. Rusia, ha dicho, espera la visita de un responsable de Agricultura español para tratar este asunto, informa Pablo X. de Sandoval.

La industria del sector cárnico español ha pedido, efectivamente, que se produzcan esos contactos antes de que esa crisis vaya a más. Desde Asocarne, que agrupa a las empresas de despiece, mataderos y transformación, recuerdan que hay más de 85.000 empleos directos en este sector, sin incluir a ganaderos, detallistas y otros proveedores. España produce casi cinco millones de toneladas de carnes. De ellas, cerca de tres millones son de porcino, a lo que se suman 1,2 millones de toneladas de elaborados cárnicos de cerdo. Se exportan unas 800.000 toneladas de porcino, en su mayoría a la UE. Sólo el 25% del total va a otros países, entre los que Rusia es el mayor importador (unas 100.000 toneladas).

Las maniobras de veto al porcino por parte de algunos países aprovechando la nueva gripe sólo se entienden como una excusa: "En momentos de crisis económicas surgen presiones proteccionistas que pueden adoptar las formas más originales. Se deja de importar por razones medioambientales, laborales, sanitarias. Se recurre a esas barreras para proteger el comercio interior", explica el investigador del Real Instituto Elcano y profesor de la Universidad Autónoma de Madrid Federico Steinberg.

Y coincide con él el economista jefe de Intermoney, José Carlos Díez: "Las exportaciones mundiales han caído un 25% desde octubre, nunca tanto desde los años treinta, pero ahora los datos en China y Japón son ya bastante buenos. Esta medida es más psicológica, para tranquilizar a la gente, no creo que frene los flujos del comercio exterior".

La crisis por la nueva gripe no afecta sólo al comercio. Los mexicanos están sufriendo estos días aislamiento y "discriminación", dicen, en países como China, hasta donde se envió un avión para repatriarlos y con quien el Gobierno mexicano ha mantenido roces severos. Y en California se enfrentan a tensiones xenófobas, que relacionan gripe e inmigración.

Una segunda persona murió ayer en Tejas. Se trataba de de una mujer que sufría enfermedades crónicas y que residía en el condado de Cameron, junto a la frontera con México. La OMS elevó ayer a 1.419 los afectados por el H1N1. Una enfermedad que, según esta organización, se ha cobrado ya 30 muertos (sin contar la mujer de Tejas) y que afecta a 21 países. En España hay 73 infectados, aunque sólo dos hospitalizados. Y 56 más están en investigación, pero sólo en Cataluña se tratan con antivirales de manera preventiva unas 300 personas.

España es el cuarto país más tocado por el H1N1, tras México, EE UU y Canadá. Se disparan en Europa, además, los contagios en personas que no viajaron a México. Son ya 15, según el Centro Europeo de Detección de Enfermedades (ECDC), sobre todo en Reino Unido y España, con cinco casos. El director general adjunto de la OMS, Keiji Fukuda, aseguró ayer que la situación en España y Reino Unido no sigue un ritmo similar ni un patrón de contagio como los de México.

A pesar de que en España no se ha registrado una sola muerte, hay cierto nerviosismo. Ayer, en el aeropuerto de Barcelona, donde aterrizó un avión procedente de Nueva York con un viajero a bordo con síntomas de gripe, informa Maiol Roger. Los 300 pasajeros estaban sobresaltados, por lo que se activó el protocolo para casos de H1N1 y se retuvo al pasaje en el aeropuerto. El enfermo fue trasladado al Hospital de Bellvitge y horas después se descartó que tuviera el virus. Barajas recibió un aterrizaje de un avión que iba a Málaga desde Dinamarca, porque sospechaban de un pasajero que finalmente sufría un infarto. Y una niña de tres años procedente de México también ha desatado el nerviosismo en este aeropuerto. Tenía fiebre, pero sólo por una faringitis.