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Israel bombardea una playa del norte de Gaza y mata a 10 civiles palestinos

Hamás advierte al Gobierno israelí de las consecuencias del asesinato de su jefe de seguridad

Naiara Galarraga Gortázar

Al menos 10 civiles, entre ellos tres niños y tres mujeres, que pasaban la tarde en la playa, murieron ayer en el norte de la franja de Gaza tras un ataque israelí. El bombardeo causó al menos 40 heridos. El presidente palestino, Mahmud Abbas, condenó esta "matanza sangrienta". Decenas de miles de personas asistieron al entierro del jefe de seguridad del Gobierno de Hamás, Yamal Abu Samhadana, líder también de los Comités Populares de la Resistencia, que murió en la madrugada de ayer en un ataque aéreo. El brazo armado de Hamás anunció que interrumpirá la tregua que cumple desde 2005.

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La aviación y la flota israelíes bombardearon diversas zonas de la franja de Gaza desde las que se lanzan misiles caseros sobre el sur de Israel. La tensión se eleva en los territorios palestinos tras la muerte de al menos 17 personas en Gaza desde el jueves por la noche.

El ataque más grave ocurrió en una playa del norte de la franja de Gaza hacia las cuatro de la tarde. Al ser viernes, festivo para los musulmanes, estaba concurrida. Muchos de los heridos son niños. Por ello, el Ejército israelí ha abierto una investigación. Un portavoz militar lamentó "haber alcanzado a inocentes" y aseguró que su objetivo era un campo de lanzamiento de cohetes Kassam. A las siete y media, el jefe del Estado Mayor, Dan Halutz, ordenó suspender los bombardeos sobre Gaza.

Los ataques de ayer respondían a los cuatro cohetes lanzados desde Gaza tras la muerte de Samhadana, de 43 años. El Ejército israelí se negó a aclarar si él era el objetivo o si, como explicó al principio, desconocía que Samhadana, el segundo en su lista de palestinos más buscados, estaba en el campo de entrenamiento militar de Gaza atacado. El Ejecutivo islamista considera al "Gobierno israelí responsable absoluto del crimen, de sus consecuencias y de las reacciones que pueda desencadenar". Junto a Samhadana murieron tres miembros de su grupo y diez resultaron heridos. Ayer fallecieron otros tres milicianos en un ataque aéreo tras lanzar un Kassam.

Decenas de miles de personas, asistieron ayer en Gaza al funeral del líder palestino. El portavoz del Ministerio del Interior, al que el fallecido pertenecía desde abril con cargo de director general, Jaled Abu Hilal, declaró que "los palestinos tienen el derecho de responder a este crimen por todos los medios". Las milicias prometieron vengar los últimos ataques.

Los Comités Populares de la Resistencia acusaron a Israel de haber "abierto las puertas del infierno. Nuestros cohetes lloverán sobre la entidad sionista y nuestros héroes se volarán" en el Estado judío. Los Kassam, que según los israelíes fueron creados por Samhadana, atemorizan a los vecinos de localidades cercanas a Gaza. Cuatro cayeron ayer en Sderot (Israel). Nadie resultó herido.

El brazo armado de Hamás, los batallones de Azedín al Kasam, anunció que interrumpirá temporalmente la tregua que cumple desde hace 18 meses, y que atacará ciudades israelíes: "Los terremotos volverán a las ciudades de los sionistas". Las Brigadas de los Mártires de Al Aqsa, el brazo armado de Fatah (el partido de Abbas), advirtieron que "tomarán cumplida venganza" de la muerte de Samhadana, a quien Israel acusaba de estar tras el atentado contra un convoy de EE UU en Gaza en 2003 que causó tres muertos.

Israel no logra atajar los cada vez más frecuentes lanzamientos de Kassam. En 2005, se dispararon desde Gaza 29 al mes; en lo que va de año suman 94 mensuales. El 40% ha impactado en ciudades. Los militares preparan un sistema para interceptarlos, pero el mecanismo es muy caro y no estará listo antes de seis meses.

El cadáver del jefe de seguridad del Gobierno palestino, Yamal Abu Samhadana, asesinado en la madrugada de ayer, trasladado en su funeral.
El cadáver del jefe de seguridad del Gobierno palestino, Yamal Abu Samhadana, asesinado en la madrugada de ayer, trasladado en su funeral.ASSOCIATED PRESS

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Sobre la firma

Naiara Galarraga Gortázar
Es corresponsal de EL PAÍS en Brasil. Antes fue subjefa de la sección de Internacional, corresponsal de Migraciones, y enviada especial. Trabajó en las redacciones de Madrid, Bilbao y México. En un intervalo de su carrera en el diario, fue corresponsal en Jerusalén para Cuatro/CNN+. Es licenciada y máster en Periodismo (EL PAÍS/UAM).

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