Al Qaeda llama a boicotear el referéndum que convoca Abbas

A medida que se acerca el fin del ultimátum lanzado a Hamás por el presidente palestino, Mahmud Abbas, hace casi dos semanas, llegan del exterior voces a favor y en contra de que los palestinos acudan a las urnas. El Gobierno ruso es partidario de que se vote; Al Qaeda, no. El ministro de Exteriores ruso, Serguéi Lavrov, declaró que su Ejecutivo respalda un referéndum que permita avanzar hacia la creación de "una entidad nacional independiente". Ayman al Zawahiri, número dos de Osama Bin Laden, llamó, en un vídeo difundido por Al Yazira, al boicoteo contra los planes del presidente y a apoyar la guerra santa.

Abbas tiene previsto anunciar hoy la fecha del referéndum sobre el documento elaborado por líderes de Fatah y Hamás encarcelados en Israel y en el que se reconoce implícitamente la existencia de Israel en las fronteras de 1967. El portavoz de Abbas, Nabil Abu Rudeina, aseguró que la consulta debería celebrarse el 31 de julio.

Pero el Gobierno de Hamás no tira la toalla. El primer ministro, Ismail Haniya, hizo ayer un nuevo intento de convencer a Abbas para que desista de su intención y apeló a la necesidad de mantener la unidad después de que el Ejército israelí matara en la víspera al jefe de la seguridad, Yamal Abu Samhadana.

Haniya envió una carta al presidente de la Autoridad Nacional Palestina en la que le solicita, "en nombre del islam, que promueva el diálogo [sobre la iniciativa] pero no un referéndum". Sostienen los islamistas que la consulta popular "carece de bases legales o constitucionales". Por eso quieren proseguir el hasta ahora infructuoso debate entre todas las facciones con la vista puesta en la formación de un Gobierno de unidad nacional.

Pero Fatah, el partido de Abbas y perdedor de los comicios de enero, sigue en sus trece. Y asegura que la pelota está en el tejado de Hamás. "Cuando existe una disputa, los dirigentes preguntan a los electores qué opinan. Nos gustaría que Haniya aceptara la iniciativa de los presos y así no nos obligara a acudir a un referéndum", respondió Saeb Erekat, asesor de Abbas, al primer ministro.