El juez chileno Carlos Cerda dictó ayer el procesamiento y ordenó el arresto domiciliario del ex dictador Augusto Pinochet por cuatro delitos de corrupción relacionados con las millonarias cuentas secretas que mantuvo en el exterior, especialmente en el banco estadounidense Riggs.
Angela Merkel, la recién estrenada canciller alemana, escogió París y Bruselas para estrenarse como canciller en el extranjero y mostrar así la importancia que concede al eje franco-alemán y a la UE. En París evitó pronunciarse sobre los grandes temas que ambos países tienen sobre la mesa, aunque afirmó que los dos comparten "una concepción de la economía social de mercado".
Harbin, capital de la provincia Heilongjiang, en el extremo noreste de China, una ciudad de 3,5 millones de habitantes, se ha quedado sin agua. Las autoridades han cortado el suministro para evitar que llegue a los grifos el agua contaminada del río Songhua.
La decisión sobre la retirada de tropas no se hará de manera unilateral y Washington sigue manteniendo que no es oportuno establecer calendarios con fechas, pero aumentan los indicios de que los planes están hechos. Según Condoleezza Rice, "el presidente ha dicho que tan pronto como los iraquíes estén listos reduciremos nuestras fuerzas, y creo que ese momento va a llegar bastante pronto".
¿Quería el presidente de EE UU bombardear la sede central de Al Yazira, la televisión árabe que suele difundir los comunicados de Osama Bin Laden? Según el diario británico The Daily Mirror, George W. Bush le transmitió esa idea a su amigo Tony Blair en una reunión en la Casa Blanca el 16 de abril del año pasado.
El Gobierno cubano incrementó ayer las tarifas eléctricas y decretó la subida de algunos salarios y pensiones como parte del plan de reordenamiento económico y de eliminación de subsidios estatales anunciado la semana pasada por Fidel Castro.
RICARDO M. DE RITUERTO
El jefe del Gobierno húngaro se niega a aceptar de inmediato la disciplina presupuestaria de la Unión Europea
El ex presidente de Brasil Fernando Henrique Cardoso, de 74 años, mostró ayer su convencimiento en Madrid de que la grave crisis política que atraviesa su país con la corrupción que asuela al Partido de los Trabajadores (PT) y a sus socios de Gobierno no perjudicará la economía.