El presidente anuncia un aumento del 37% en la ayuda al desarrollo

El presidente José Luis Rodríguez Zapatero anunció ayer en el Congreso que los Presupuestos Generales del Estado que el Gobierno entregará a la Cámara dentro de una semana incluirán un aumento de la ayuda al desarrollo por valor de 656 millones de euros, lo que supone un 37% más que el pasado año. La cooperación oficial española, añadió, habrá crecido, así, en 875 millones de euros en los dos ejercicios del Gobierno socialista, con un incremento total del 45%, que la sitúa en el 0,35% del PIB, la mitad del objetivo del 0,7% que la Cumbre del Milenio de la ONU fijó en 2000 para 2005.

El líder del PP, Mariano Rajoy, afirmó que ese aumento no tiene nada que ver con lo que está pasando en la ONU y desacreditó el anuncio de Zapatero como mera "propaganda", durante un debate en el que acusó al presidente de utilizar a la organización emblemática del multilateralismo para "disfrazar" los problemas de las tropas españolas en Afganistán.

Zapatero consideró "muy estimable" el documento final de la cumbre celebrada en Nueva York y "muy valioso" el hecho de que todos los países aprobaran una declaración que, aunque insuficiente para las necesidades de reforma, recoge un respaldo unánime a los objetivos de lucha contra la pobreza y contra el terrorismo, y el apoyo a la Comisión de Consolidación de la Paz y a la Alianza de Civilizaciones.

Influencia en la ONU

Rajoy destacó que ni siquiera se ha logrado un acuerdo sobre lo que es terrorismo, señaló que España se ha quedado aislada por el proyecto de incrementar las tasas aéreas frente a sus socios en la Alianza contra el Hambre, añadió que la Alianza de Civilizaciones había sido respaldada "por cortesía", pero no es una idea nueva ni le cuesta nada a nadie, salvo a España, que podrá un millón de dólares. Y concluyó que el Gobierno no influyó para nada en la cumbre.

Zapatero recordó que el líder del PP declaró en febrero de 2003 que "Naciones Unidas es un organismo suprimible", y afirmó: "Cada Gobierno hace el papel que deje como huella en los foros internacionales. De momento, este Gobierno ha promovido una iniciativa que la ONU ha hecho suya y que ha sido aprobada por todos los países del mundo. La huella que su Gobierno dejó en la ONU más vale que la olvidáramos todos, después de aquella intervención de la ministra de Asuntos Exteriores". Zapatero se refería al deslabazado discurso de Ana Palacio, televisado a todo el mundo, en la sesión del Consejo de Seguridad previa la invasión de Irak.

Rajoy acusó al presidente de "manipulador", algo que no puede ser un presidente del Gobierno, porque había omitido que lo que él dijo en 2003 es que la ONU sería suprimible si no fuera capaz de imponer a Sadam Husein sus resoluciones. Zapatero intentó rebajar el tono del enfrentamiento, e invitó al líder del PP a cooperar en la Alianza de Civilizaciones.