Washington pide ayuda a la ONU para acelerar el traspaso de poder en Irak

A petición de EE UU y del Consejo de Gobierno iraquí, el secretario general de la ONU, Kofi Annan, estudiará mandar una misión de expertos a Irak para evaluar la posibilidad de celebrar elecciones generales en los próximos meses tal y como lo viene exigiendo uno de los principales opositores a la transición, el líder chií, el ayatolá Alí Sistani. Annan, que se reunió ayer en Nueva York con el administrador Paul Bremer y una delegación iraquí, se mostró reticente en convertirse en el árbrito de un proceso político en el que no ha participado y anunció que las discusiones continuarían.

La de ayer fue una partida de póker en la que los jugadores evitaron mostar todas sus cartas. Las discusiones, aseguraron todas las partes, fueron "francas", "cordiales" y "útiles" pero no llegaron a ninguna conclusión clara. Más negociaciones serán necesarias en los próximos días para aclarar cómo la ONU, la Autoridad Provisional de la Coalición (APC) y el Consejo de Gobierno iraquí consiguen trabajar juntos. Todos tienen ideas muy distintas sobre la cuestión.

Bremer pidió ayer a Annan que se involucre en el proceso y mande lo antes posible a Irak una misión técnica para evaluar si es posible elegir directamente un Gobierno provisional iraquí en los próximos tres meses. EE UU, que ya se ha pronunciado en contra de esta opción y a favor de un sistema de comicios regionales indirectos, espera en el fondo que la ONU avale su posición y así se lo comunique al líder chií, el ayatolá Alí Sistani, que se ha convertido en la principal oposición a los planes de transición de Washington. "Esperamos que la ONU vuelva a jugar un papel importante lo antes posible", volvió a repetir Bremer.

Annan, cauto, anunció que sopesaría seriamente la idea de mandar una misión de expertos "y en el caso contrario, presentar otras opciones". En una rueda de prensa algo confusa, prueba de las intensas presiones de EE UU, el secretario general la dio incluso por hecha. "Cuando el equipo viaje hasta allá analizará la cuestión más en detalle". Bremer también se entrevistó en Nueva York con el nuevo asesor de Annan, el ex envíado especial para Afganistán, Lakhdar Brahimi, informaron fuentes de la ONU. EE UU ha hecho saber que le gustaría que Brahimi, un diplomático argelino con gran experiencia en Oriente Próximo, se haga cargo de la misión y hable con Sistani. Annan no confirmó ayer ni la fecha de partida ni la composición de su equipo aunque aseguró que lo haría "pronto".

Abdel Aziz al Hakim, uno de los miembros del Consejo de Gobierno más próximos a Sistani, reiteró que el líder chíi deseaba entrevistarse con una delegación de la ONU. "Sus conclusiones sobre la posibilidad de celebrar elecciones serán respetadas", aseguró.

No queda mucho tiempo. La delegación iraquí que se entrevistó con Annan y debía comparecer por la tarde en una sesión especial del Consejo de Seguridad aseguró que por ahora no se contemplaba retrasar el traspaso de poderes. "Estamos todos de acuerdo en que debemos mantener la fecha del 30 de junio para crear un Gobierno provisional", dijo el presidente de turno del Consejo de Gobierno, Adnan Pachachi. Esto no deja mucho margen a la ONU y a la Coalición para actuar. Deben tomar una decisión antes de la redacción de la Ley fundamental a finales de febrero. Aunque acepte un papel mediador, la ONU sigue mostrándose muy reticente a participar en un proceso de transición del que hasta ahora había sido marginada. La idea de Annan es esperar hasta que un Gobierno provisional iraquí tome las riendas en verano. "Aunque estemos pensando en ser más operativos a partir de julio si queremos empezar a trabajar con el nuevo Gobierno no podemos llegar un día después".