Madrid, por las nubes

La cesta de la compra sale muy cara en Madrid. Comprar fruta y verdura en esta comunidad es más costoso que en ninguna otra. El precio es un 24% superior al de Canarias, que es la que ofrece precios más asequibles. Después de los madrileños, los que más tienen que pagar por este tipo de productos son los catalanes, los baleares, los cántabros y los riojanos, según el estudio encargado por el Ministerio de Economía a la Universidad Complutense de Madrid. "Lo que hemos intentado es ofrecer una serie de fotografías del país para saber cómo se comportan los precios", explicó ayer el catedrático Javier Casares.

Las diferencias de precios son grandes entre las comunidades, a la vista de los datos. Los precios en frutas y verduras están por encima de la media nacional en cinco comunidades. Madrid es, con diferencia, la más cara en este tipo de alimentos frescos, pero a la hora de comprar pescado son los canarios los que tienen que pagar precios más altos, pese a su cercanía a la mar. En cambio, comprar pescado en un establecimiento de Madrid es sólo un 9% más caro que en la comunidad más barata, que es Cantabria.

"Para analizar las diferencias de precios en las comunidades autónomas hay que tener en cuenta una serie de peculariedades, como el efecto que provoca estar cerca de una frontera, la insularidad o la cercanía al mar", indicó Casares. "Por ejemplo, para algunos productos hay que tener en cuenta que Madrid cuenta con el segundo mercado mayorista del mundo [Mercamadrid] tras el de Tokio", añadió el economista. Además de en las Islas Canarias, el pescado está por las nubes en Cataluña, Baleares y la Comunidad Valenciana.

La carne es más cara que la media nacional en cuatro comunidades. Pero los que tienen que dedicar mayor presupuesto para comprar un filete son los residentes de Baleares. El precio en esta comunidad es un 16% más elevado que en Extremadura, que es la más barata. Tras las islas, las más caras son Canarias, Cataluña y la Comunidad Valenciana.

"En algunas comunidades, como Cataluña y Navarra, el nivel de renta es el factor más determinante para explicar las diferencias de precios", puntualizó Casares durante la conferencia de prensa para presentar el estudio, junto al secretario de Estado de Comercio, Francisco Utrera, en la sede del Ministerio de Economía en Madrid.

Los precios se acercan más cuando se habla de droguería y alimentación envasada. En el primer caso, Navarra es la más cara, pero sólo un 8% más que la Comunidad Valenciana, que es la que vende estos productos a un precio más razonable. Navarra vuelve a ser la más cara en la venta de alimentos envasados.

"Los productos perecederos son los que presentan una mayor variabilidad, porque su comercialización es mucho más compleja", explicó Casares, que aclaró que con este estudio no pretende ser una guía general para el consumidor, sino que persigue analizar únicamente los precios por canal de venta y regiones. "Sería pretencioso que un grupo de economistas dijeran a las amas de casa cómo tienen que hacer la compra", dijo.

Las ciudades más caras

Con las ciudanes pasa lo mismo que con las comunidades. Se aprecian grandes diferencias de precios en los alimentos frescos. Y, de la misma forma, Madrid repite como la localidad más

cara: llenar el cesto de compra con frutas y verduras cuesta en la capital un 31% más que en Lugo que es la más barata. Ese mismo porcentaje se sitúa en el 29% en Girona, el 26% en San Sebastián y el 24% en Castellón de la Plana.

El pescado más barato se vende en Jaén, mientras a que los ciudadanos de las Palmas de Gran Canaria no les queda más remedio que pagar por lo mismo un 35% más que los jienenses. En Santa Cruz de Tenerife no lo tienen mucho mejor, ya que el precio del pescado alcanza una direrencia con Jaén del 30%. Lugo, que tenía la ventaja de poder comprar los frutas y verduras más baratas, se encuentra también en los puestos de cabeza del pescado más caro.

Respecto a la carne, un filete cuesta un 22% más en San Sebastián que en Salamanca, donde se vende más barato que en ninguna otra ciudad española, según los datos del estudio.

Las diferencias se vuelven a acortar en droguería. Productos como el detergente se encuentran más económicos que en el resto en Castellón de la Plana; en los de Pamplona están los más caros. Los precios de los alimentos envasados más asequibles están en Albacete y Ciudad Real.