Las galeradas de 'Cien años de soledad' buscan hoy otra oportunidad en Christie's

Las galeradas de Cien años de soledad corregidas por la propia mano de Gabriel García Márquez buscan hoy una segunda oportunidad para ser compradas. Será en la sala londinense de Christie's, que intentará venderlas con un precio de salida de 320.000 euros, un año después de que otra casa de subastas de Barcelona lo hiciera sin éxito. Colombia y España no participarán institucionalmente. Ahora el interés es doble, porque en el primer volumen de las recién editadas memorias de Gabo, Vivir para contarla, se habla del mundo del que procede su novela más famosa.

El lote número 106 de King Street, de Londres, cerrará hoy, hacia el mediodía, una intensa jornada de manuscritos antiguos y textos literarios. Es un estuche de piel marrón rematado en dorado que guarda 181 páginas amarilleadas por el tiempo de las últimas pruebas de imprenta, salpicadas de correcciones hechas con bolígrafo y rotulador, de una de las novelas más importantes del siglo XX.

García Márquez (Aracataca, 1927) hizo en total 1.026 correcciones surgidas tanto por culpa de los duendes de imprenta como por su espíritu perfeccionista. Creó así, en algunas páginas, una maraña de letras y frases en todas las direcciones en busca de reconducir el destino de Macondo. Desde la confirmación de que el nombre del patriarca de la familia que se abre paso en las selvas para crear un poblado y la semilla de su estirpe debía llamarse José Arcadio Buendía y no "Antonio", hasta dejar claro que las mariposas que han de envolver con sus vuelos a Mauricio Babilonia deben ser amarillas.

Estas pruebas de imprenta pertenecen a Héctor Delgado, heredero del cineasta español Luis Alcoriza (1921-1992) y su esposa, Janet Riesenfeld, a quienes el Nobel colombiano se las había obsequiado tras enviar las anotaciones definitivas a la editorial Sudamericana, de Buenos Aires, en 1966. Es lo más cercano al original de Cien años de soledad, cuyo verdadero manuscrito acribillado de correcciones fue roto por Gabo y su esposa, Mercedes Barcha, en mayo de 1967. Lo hicieron tan pronto tuvieron en sus manos el primer ejemplar impreso de la novela. ¿La razón? "Que nadie pudiera descubrir los trucos de mi carpintería secreta", confesó el autor en un artículo el año pasado.

Las galeradas en subasta tienen el valor añadido de que están doblemente autografiadas. La primera dedicatoria dice: "Para Luis y Janet, una dedicatoria repetida, pero que es la única verdadera: 'Del amigo que más los quiere en este mundo'. GABO, 1967". Años más tarde el escritor añadiría: "Confirmado. GABO, 1985".

Aunque para algunos expertos en Gabo, como Conrado Zuluaga y Dasso Saldívar, lo ideal sería que estas galeradas las conservara Colombia, todo indica que no será así. La Embajada colombiana en Gran Bretaña no ha recibido instrucciones para participar en la subasta, mientras la ministra de Cultura encargada, Adriana Mejía, no se manifestó sobre el tema. En España, por su parte, Mercedes Dexeus, directora del Departamento de Patrimonio Bibliográfico de la Biblioteca Nacional, reconoce el interés de la pieza, pero asegura que "el precio es muy alto para el testimonio que aportan estas galeradas para el conocimiento de la obra de García Márquez. No nos parece oportuno teniendo en cuenta que manejamos dineros públicos". El precio del texto, estimado entre 320.000 y 480.000 euros, es considerado alto por tratarse, además, de un autor vivo. Un precio que contrasta con los 500 dólares que recibió García Márquez como adelanto de la novela en 1966, por parte de Francisco Porrúa, editor de Sudamericana.

Christie's confía en que esta segunda oportunidad que busca Cien años de soledad de salir del baúl donde ha estado 35 años sea exitosa. "Sale a buen precio y sería frustrante que no encontrara comprador. Confiamos, además, en nuestra experiencia como casa de subastas internacional", dice Margaret Ford, experta en libros y manuscritos de Christie's, informa Lourdes Gómez.

En el primer intento, organizado en 2001 por subastas Velázquez de Barcelona, todo iba bien. Incluso el Gobierno español mostró interés en el documento, con un precio de salida de 500.000 dólares. Diez días antes de la subasta, los acontecimientos del 11-S aceleraron la incertidumbre económica y los interesados se retiraron.

Logre comprador o no, el acto de hoy muestra el abismo existente entre el Monte de Piedad, en México DF, y Christie's. Mientras el primero fue el lugar que los García Márquez frecuentaron entre 1965 y 1966 para empeñar todo lo que pudieran con el fin de cumplir con su destino de contar la historia de Macondo; el "¿quién da más?" de Christie's es lo que otros están dispuestos a pagar por lo que entonces era sólo ilusión. Una que ya han compartido 30 millones de compradores de la novela en 46 lenguas.