Repsol YPF redujo un 58% los beneficios en 2001 por sus inversiones en Argentina

La mezcla de crisis en Argentina, descenso en los precios del crudo (cinco dólares por barril de media el pasado año) y enfriamiento económico internacional convirtió el año 2001 en un cóctel amargo para Repsol YPF, petrolera que controla un 45% del mercado en España. El grupo obtuvo el pasado ejercicio un beneficio neto de 1.025 millones de euros, un 57,8% menos que en 2000, pese a que, en general, las cifras de producción, ventas de productos petrolíferos y petroquímicos y ventas de gas (ver cuadro) determinaban un ejercicio discreto y no un desastre.

Sin la crisis de Argentina, Repsol YPF, que vendió productos por valor de 43.653 millones de euros, habría ganado 1.982 millones netos. Una cifra que ya supone un considerable recorte del 18,4%. No obstante, habría mejorado incluso las previsiones de los analistas en un año desfavorable para las empresas del sector.

Pero el hundimiento de la economía argentina (país en el que Repsol es líder tras la compra en 1999 de YPF por 15.000 millones de dólares), con el abandono de la paridad peso-dólar primero, la devaluación del peso después y la adopción de medidas negativas para las multinacionales (impuesto a la exportación del 20%), ha obligado al grupo petrolero a dedicar 2.738 millones de euros a apuntalar sus cuentas. 'Con un criterio de prudencia, conservador', según fuentes de la petrolera, 'el grupo ha trabajado para hacer frente al peor de los escenarios posible'.

De ese ajuste de 2.738 millones de euros, 1.450 millones, con cargo a reservas, se han destinado a sanear el balance, tocado por la devaluación del peso (estimada en un 41,2%, según los criterios del Instituto de Contabilidad y Auditoría de Cuentas, ICAC). Otros 1.288 millones de euros se han destinado a tapar (provisionar) los previsibles agujeros derivados de la caída de ventas, el aumento de impagados, el descenso en la valoración de los activos de producción y la conversión de parte de la deuda de dólares a pesos, lo que la encarece.

El desglose de las provisiones mencionadas, detallado ayer por Repsol YPF, revela toda la profundidad del impacto que ha tenido la crisis argentina: el resultado operativo, directamente disminuido en 251 millones de euros; el valor de las reservas, rebajado en 653 millones, y los gastos financieros, incrementados en otros 189 millones. Añádase el impuesto a la exportación (sobre el que aún se debate en Argentina) y se obtienen los 1.288 millones evaporados de los resultados de 2001.

Pero no todo fue negativo en el año, según se ocuparon de destacar ayer los responsables de Repsol YPF. Así, la deuda del grupo se redujo en 3.843 millones de euros, situándose en 16.555 millones gracias a un doble mecanismo: la reestructuración de la carga financiera y la aceleración del proceso de desinversiones.

Repsol YPF vendió activos en 2001 por 1.237 millones de euros, en Egipto y en Argentina (Edenor) principalmente. El proceso de ventas continuará este año. Ayer mismo, Repsol YPF vendió un 18,5% en la Compañía Logística de Hidrocarburos (CLH) a la canadiense Embridge, en una operación, por importe de 420 millones de euros, en la que Cepsa y BP también se desprendieron de parte de sus participaciones (5,3% y 1,3%, respectivamente).En este año en el que Repsol YPF seguirá reduciendo deuda (2.500 millones de euros es el objetivo), la compañía tiene como bazas en juego, además de la venta de CLH (aún controla un 42,5%), la venta de Enagas (de su participada Gas Natural) y la limitación de inversiones a 'un máximo' de 3.200 millones de euros. En 2001, el grupo invirtió 4.456 millones de euros. Otro dato positivo del ejercicio ya cerrado fue el incremento de las reservas, que crecieron un 13,4% y alcanzaron los 5.606 millones de barriles.