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Piqué condena en nombre de la UE la política de demoliciones de Sharon

Israel reanuda los asesinatos selectivos con un atentado contra un cabecilla de Al Aqsa

Josep Piqué expondrá el próximo miércoles al primer ministro israelí la 'más profunda protesta y rechazo' de la Unión Europea por las demoliciones de viviendas palestinas y de infraestructuras como el aeropuerto de Gaza, según anunció ayer el propio ministro español de Exteriores, en viaje hacia Ammán, donde inició anoche su primera gira como presidente del Consejo de Ministros de la UE por Oriente Próximo. El ministro español expresó con esta declaración una divergencia europea con respecto a la política de Estados Unidos.

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El secretario de Estado, Colin Powell, ha afirmado que las acciones criticadas por Piqué son reacciones adecuadas a la amenaza terrorista que sufre Israel. El presidente del Consejo comunitario se declaró, en cambio, ayer 'consternado y preocupado' por estos resultados de la represalias israelíes frente a los atentados de la semana pasada. Son medidas que 'además de tener graves consecuencias de índole humanitaria, no servirán para mejorar la seguridad de Israel, sino que, al contrario, suponen un paso más en la espiral de violencia que se vive en la zona'.

Piqué indicó, además, que 'la UE ya ha expresado en ocasiones anteriores su rechazo a las demoliciones de viviendas e infraestructuras' y recordó que el último Consejo Europeo, celebrado el pasado mes de diciembre en Laeken, 'pidió a Israel el cese de estas prácticas'.

Otro foco fundamental de divergencia creciente entre las políticas de la UE y de EE UU en Oriente Próximo quedará en evidencia el jueves, cuando Josep Piqué reafirme en Ramala el apoyo europeo a Yasir Arafat como máximo interlocutor palestino. Aunque Powell sigue manteniéndole esa consideración, otros sectores de la Administración norteamericana y el propio Bush, tienden a inclinarse hacia la tesis de Sharon de que el presidente de la Autoridad Nacional Palestina estaba implicado en la importación clandestina de armas desmantelada con el apresamiento del buque Karine A. y ha dejado de ser un interlocutor fiable.

Piqué le reiterará, no obstante, a Arafat la recomendación de que depure al máximo las responsabilidades de los implicados en el tráfico de armas. Israel entiende que lo hecho hasta ahora por el líder palestino no es suficiente.

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El ministro español, que será acompañado en toda la gira por el representante de la UE en la zona, Miguel Ángel Moratinos, supo ayer, cuando estaba en pleno viaje, que el Gobierno jordano, incluido el ministro de Exteriores que debía recibirle, había dimitido. Fuentes españolas enmarcaron el hecho en 'un mero reajuste técnico del Gabinete' y aseguraron que Piqué sería recibido hoy por el rey Abdalá. Anoche, el ministro declinó entrevistarse con Saher Bak, que había sido designado ministro de Estado de Exteriores, y fue sustituido por el secretario de Estado de Exteriores, Miquel Nadal.

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