Argentina aplaza la suavización del bloqueo de las cuentas bancarias

El Gobierno argentino postergó, 'al menos hasta el martes o el miércoles', el anuncio de las correcciones que permitirán a los ahorradores atrapados en el corralito financiero desde comienzos de diciembre disponer con algo más de libertad del dinero depositado en los bancos. Según fuentes del equipo económico consultadas por EL PAÍS, 'todo depende de cómo evolucione la cotización del dólar en el mercado libre'.

Si la brecha con la paridad fijada en 1,40 pesos por dólar se amplía demasiado la puerta de la jaula donde permanecen encerrados unos 50.000 millones de dólares se cerrará en la misma medida.

En entrevistas que concedió a los dos principales periódicos argentinos, La Nación y Clarín, el presidente Eduardo Duhalde describió al corralito como 'una bomba de tiempo muy difícil de desactivar'. Según el jefe del Estado, 'lo que han dejado es una bomba activada, que está funcionando; si esa bomba explota nadie cobra un peso y se cae todo el sistema. ¿Cuál es la actitud responsable del Gobierno? Que no explote'.

La batalla se libra en todos los frentes y todos participan de ella. La Iglesia, a petición del presidente, inicia hoy el diálogo multisectorial con los partidos políticos, los empresarios y las organizaciones sindicales y sociales. El equipo económico, sometido a la presión de los cacerolazos, atiende a la vez la reivindicación airada de los que demandan cada día por el dinero que confiaron a los bancos, discute medidas que no provoquen nuevos desequilibrios en el sistema y ruega que la desesperación por comprar dólares o aumentar los precios de los productos, para cubrirse de la devaluación del peso, no dispare la inflación. Los técnicos confían en que el alza del coste de vida pueda situarse al cabo del año entre el 9% y el 11%.

La memoria histórica de los tres picos de hiperinflación que padeció Argentina a finales de los años ochenta y comienzos de los noventa provocó la reacción positiva de los consumidores. Los comerciantes se alían con sus clientes y denuncian a los proveedores que aumentan sus precios. Algunos de ellos llegaron a colocar en los supermercados el aviso de la empresa, que aumentó el producto con el número de teléfono adonde debían llamar los clientes que querían quejarse.

El ministro Jorge Remes Lenicov ha retomado el contacto directo y personal con Horst Köhler, el director gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI). Uno de los resultados de esa conversación fue la convocatoria esta misma semana a una teleconferencia, con funcionarios expertos de diversos países que superaron procesos de devaluación, como Brasil, Malasia, Indonesia y México, y técnicos del Banco Interamericano de Desarrollo(BID). El Gobierno argentino confía en que se podrá reunir a corto plazo una ayuda financiera de 15.000 millones de dólares (16.950 millones de euros) si se destraban las cuotas comprometidas del blindaje financiero que se selló hacia finales de 2000, y se consiguen fondos extras de los organismos multilaterales de crédito.

Con esos recursos se podría compensar o ayudar a los sectores afectados por la devaluación del peso. El presidente Eduardo Duhalde reconoció que 'el país no tiene todavía un plan sostenible' y consideró 'vital' para salir de la crisis la ayuda de los países más desarrollados. Pero descartó el regreso al 'viejo proteccionismo' y propuso a cambio el modelo económico que desarrolló Chile: 'Yo vengo defendiendo el modelo chileno desde 1988. No podemos buscar otros en Europa o Australia, porque son muy distintos de nosotros. Tenemos un modelo como el chileno que desarrollaba todo lo que tenía que ver con su potencialidad, defendían lo propio y se integraban al mundo'.