Los controles veterinarios de Castilla y León detectan dos supuestos casos de 'vacas locas'

Tanto la Junta de Castilla yLeón como el Ministerio de Agricultura se negaron, a la espera de los resultados definitivos de Zaragoza, a informar de la ubicación exacta de las ganaderías afectadas. Fuentes autonómicas, sin embargo, señalaron que las explotaciones, de tipo medio, estaban al norte de León (aunque no en el Bierzo) y que se dedicaban tanto al ordeño como al engorde.

El consejero de Agricultura de Castilla y León, José Valín, añadió que a raíz de los análisis más de cien animales han sido inmovilizados. Valín explicó que la detección de estos casos se ha producido dentro del Plan de Seguimiento puesto en marcha por las administraciones. En concreto, las sospechas surgieron cuando los veterinarios comprobaron que los dos animales tenían dañados los cuartos traseros. 'Uno de los bovinos había muerto como consecuencia de esa alteración en las articulaciones traseras, mientras que el otro hubo de ser sacrificado', señaló Valín.

Para el titular de Agricultura, 'los dos casos detectados en esas dos explotaciones de León tienen un índice de sospecha muy alto en cuanto a la posibilidad de padecer el mal de las vacas locas, pero hasta que el laboratorio de Zaragoza no confirme los resultados de los análisis rápidos no se pueden adoptar otras medidas excepcionales como exigir el sacrificio del resto de los animales de las dos explotaciones y, por consiguiente, indemnizar a los ganaderos'.

Hace 8 o 10 días

El delegado de la Junta en León, Luis Aznar, afirmó por su parte que los tests rápidos de detección de la enfermedad fueron realizados 'hace 8 o 10 días' en la propia región y en el laboratorio de Algete. Los resultados, según Aznar, fueron 'de libro', por lo que se prevé que el tercer análisis, considerado el definitivo, ratifique los dos anteriores.

Las dos vacas enfermas nacieron en nuestro país, aunque una de ellas tenía madre austriaca. Ambas murieron en las explotaciones y sus cadáveres fueron incinerados en el centro de eliminación de residuos animales de Revisa en el pueblo de Cabreros del Río, cerca de la capital leonesa, según la Junta, por lo que se descarta que la carne haya entrado en el circuito de consumo. El consejero garantizó que los cadáveres de las dos reses fueron incinerados en la planta que Revisa tiene en León y que está autorizada para la destrucción de los materiales específicos de riesgo (MER) 'por lo que su carne no ha entrado en el circuito de consumo'.

La Junta de Castilla y León había detectado hasta el momento otros tres casos sospechosos en León, Burgos y Valladolid respectivamente, que dieron negativo después de los resultados aportados por el laboratorio de referencia en Zaragoza.

La Unión de Pequeños Agricultores de Castilla y León confiaba ayer en que los sistemas de análisis que se han establecido para detectar posibles casos de la enfermedad garanticen la calidad de la carne procedente de la cabaña vacuna, según manifestó ayer el responsable de la organización en esta comunidad, Francisco Fernández, informa Europa Press. Este portavoz recordó que los animales destinados al consumo en Castilla y León no superan los 12 meses y añadió que 'está demostrado científicamente que con animales de esa edad no existe ningún riesgo'.

Francisco Fernández instó al Ministerio de Agricultura a que agilice al máximo el fomento del consumo de la carne de vacuno, aunque señaló que esta medida es insuficiente porque no evita la bajada de los precios. La crisis generada en noviembre por la aparición en Galicia de dos casos confirmados de vacas locas, los primeros encontrados en España, ha desestabilizado los precios de la de carne.

Precios trastocados

Esa disminución ha trastocado la previsiones de mercado que productores y vendedores realizaron a principios de año. La caída de los precios del vacuno ha ido acompañada de la subida de los del porcino, pollo y conejo, según ha manifestado el presidente de la Asociación de Lonjas y Mercados de Origen, Joaquín Salvo, informa Servimedia. Desde noviembre, el nivel de sacrificios de vacuno ha descendido casi un 70% y el precio ha sufrido una reducción final de entre un 2% y un 7% en las modalidades de mayor consumo, aunque este porcentaje se eleva a un 13% en el caso de la carne de vaca, según Salvo.

Respecto a los casos sospechosos detectados en León, el coordinador del sindicato agrario COAG, Miguel Blanco, ha manifestado que se trata de 'casos aislados' que en ningún momento representan un riesgo en el consumo humano de carne de vacuno. Blanco hizo un llamamiento para que no se alarme a los consumidores, dando información clara de las zonas exactas (comarcas o explotaciones) presumiblemente afectadas por el mal de las vacas locas.

En cuanto a la situación en la UE, sólo cuatro países (Bélgica, Dinamarca, Alemania y Holanda) disponen actualmente de suficifientes tests del prion para controlar en los mataderos a los animales con síntomas de padecer la encefalopatía espongiforme bovina, o a todos los que cuenten con más de 30 meses.