El cereal, atento al dólar

Superados los efectos de la crisis económica mundial y con la aplicación de los principios recogidos en la Agenda 2000, la Comisión Europea advierte que la evolución del tipo de cambio del euro con el dólar será un factor externo clave en las próximas siete campañas. "Un euro débil puede reforzar la competitividad del cereal de la UE desde el punto de vista de la demanda, tanto externa como doméstica", afirma el informe de los servicios del comisario Franz Fischler.Bruselas prevé una rápida expansión del abandono voluntario de tierras, que pasarán de los 5,8 millones a los 6,5 millones de hectáreas en 2006. El área total dedicada al cereal crecerá ligeramente los dos próximos años, hasta los 36,7 millones de hectáreas, para, a partir de la campaña 2002-2003, con la reforma en plena aplicación, estabilizarse en los 37 millones de hectáreas y después bajar a los 36,8. Los rendimientos se situarán en las 5,88 toneladas por hectárea cuando la Agenda 2000 expire (frente a 5,46 toneladas). La producción total pasará de los 199 millones de toneladas en la campaña 1999/2000 a las 216,7 a final del periodo.

En el mercado mundial los precios permanecerán ligeramente bajos a corto plazo, previa a una ligera recuperación para el trigo y el maíz. En estas condiciones, la UE podrá exportar cantidades sustanciales sin subsidios pero siempre limitada por los acuerdos de la Ronda de Uruguay (25,9 millones de toneladas entre 2000 y 2002 para alcanzar los 28,9 en el 2006). Las importaciones permanecerán estables (5,7 millones de toneladas en 2000-2006).