Los bombardeos dejan Belgrado y otras ciudades serbias en tinieblas
Por primera vez desde que comenzara la ofensiva sobre Yugoslavia, Belgrado se halló en la más profunda de las tinieblas anoche. Los teléfonos no funcionaban, las calles y las casas quedaron sin luz, lo cual alimentó la sensación de incertidumbre de los habitantes de la capital asediada. Los misiles aliados impactaron en la red de abastecimiento eléctrica dejando también sin fluido a las principales ciudades serbias. El Ministerio de Salud yugoslavo advirtió de los problemas que pueden generarse en los hospitales serbios al carecer de equipos de emergencia.
El fluido eléctrico de Belgrado, ciudad de 1,5 millones de habitantes, se cortó repentina y completamente a las 21.50, hora local y peninsular española. Según un portavoz de la Empresa de Distribución Eléctrica, Momcilo Cebalovic, todo el sistema eléctrico serbio quedó seriamente dañado a consecuencia de un ataque aliado.Unos minutos después del corte eléctrico las emisoras de radio de la capital yugoslava dejaron de emitir, coincidiendo con el estruendo de dos detonaciones en los alrededores de la ciudad. A partir de ese momento el silencio sólo fue roto por Radio Pancevo. Esta emisora privada de ese suburbio nororiental de Belgrado aseguró que también quedó sin electricidad todo el norte del país, como Novi Sad (Vojvodina), y, al sur y oeste, las ciudades de Nis (la segunda mayor), Kragujevac, Sabac, además de otras localidades meridionales. Según esta emisora los misiles de la OTAN habrían impactado en la central eléctrica de Obrenovac, al norte de Serbia.
A las 22.10, la radio oficial serbia restableció brevemente su voz para informar: "Queridos conciudadanos, la capital ha quedado sin luz...", tras lo cual volvió a quedar muda. La agencia oficial de noticias serbia, Tanjung, aseguró anoche que las únicas provincias de Serbia con fluido eléctrico eran esta madrugada "Kosovo y Metohija". Eso sí, Tanjung estuvo sin transmitir durante dos horas. Desde que la OTAN comenzó sus ataques, el pasado 24 de marzo, no se habían registrado problemas con el abastecimiento eléctrico en las principales ciudades serbias.
La sensación de pánico fue constatada por la prensa internacional acreditada en Belgrado. Un joven de la capital relataba esta madrugada como al irse la luz llamó a las puertas de los vecinos y nadie le abrió. "El impacto sicológico del corte de la electricidad es mucho mayor que sus efectos reales". Otros habitantes de Belgrado, sin embargo, se preguntaban qué pasará con la gran cantidad de alimentos que habían acumulado en sus neveras en los últimos días.
Esta madrugada, el ministro de Salud yugoslavo, Leposava Milicevic, declaró a la cadena de televisión CNN que temen un desastre en los hospitales. "En la mayoría no hay luz y hay centenares de enfermos que necesitan estar conectados a aparatos médicos eléctricos", aseguró Milicevic.
Bloqueo del puerto de Bar
También ayer, se supo que la Marina yugoslava ordenó el cierre indefinido de Bar, el mayor puerto receptor de petróleo de la República situado en Montenegro. La medida supone que no podrán llegar pasajeros y que tampoco podrá faenar la flota pesquera. Las autoridades de Podgorica han acusado al Ejército federal de tratar de usurpar los poderes civiles.
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