Inaugurado en Chile un monumento a los muertos y desaparecidos en un campo de tortura

Ex prisioneros políticos chilenos inauguraron ayer "el muro de los nombres" en homenaje a los asesinados en el campo de tortura Villa Grimaldi, en una ceremonia en la que no invitaron a las autoridades en protesta por el apoyo del Gobierno al ex dictador Agusto Pinochet. La obra debía haber sido inaugurada por autoridades del ministerio de Vivienda, que impulsó la construcción del Parque de la Paz en el lugar en el que estuvo el campo de exterminio y tortura más importante del régimen pinochetista.Pero los ex prisioneros de Villa Grimaldi consideraron que la participación de representantes del Gobierno en el acto sería "inadecuada e impropia" en momentos en que el Ejecutivo está apoyando al ex dictador, detenido hace 65 días en Londres, a petición del juez español Baltasar Garzón que le acusa de los delitos de genocidio, tortura y terrorismo.

El colectivo de ex prisioneros, en un comunicado, señaló que resulta "incongruente e inaceptable" que representantes del Gobierno participen en un acto de recuerdo a las víctimas de Villa Grimaldi "en los mismos momentos en que este Gobierno defiende al victimario diplomática, política y judicialmente en Londres y en Madrid".

La obra inaugurada consiste en un muro de cuatro metros y medio de alto y ocho de largo en el que se han inscrito, sobre un fondo negro con letras doradas, los nombres de los 230 asesinados o desaparecidos del campo de exterminio. Sobre el muro está esculpida la frase "El olvido está lleno de memoria", del escritor uruguayo Mario Benedetti.