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Los empresarios catalanes aceptan la prórroga

A Fomento y el Círculo ya no les preocupa empezar el 96 sin nuevos Presupuestos

Los empresarios catalanes se alinean con el presidente de la Generalitat, Jordi Pujol, al aceptar la prórroga de los Presupuestos Generales del Estado de 1995. El rechazo a los Presupuestos del próximo año, anunciado por los nacionalistas catalanes, desemboca en la inevitable prórroga. Los principales foros económicos, y especialmente el Círculo de Economía, consideran que esta situación no es preocupante si se garantiza el ajuste previsto del déficit público. Por su parte, Fomento del Trabajo Nacional, la CEOE en Cataluña, propone para la próxima semana un debate entre los sectores económicos para consensuar unos Presupuestos restrictivos para 1996.Las organizaciones sectoriales y las patronales catalanas aceptan ahora una prórroga de los Presupuestos como un hecho irremediable dada la crisis política. En menos de un mes, han pasado de exigir unos nuevos Presupuestos como fundamento del impulso productivo y de la disciplina impuesta por la UE a aceptar la nueva situación. El consenso es unánime. En las últimas semanas. Juan Rosell, presidente de Fomento; Josep Piqué, presidente del Círculo de Economía, y Mariano Puig, presidente del Instituto de la Empresa Familiar, han realizado consultas con Pujol, que ayer llegó a Washington para iniciar un viaje de carácter económico y cultural de una semana a Estados Unidos.

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Los líderes empresariales respetan la actitud de Pujol y manifiestan su voluntad de no interferir en las disputas sobre el calendario electoral. Estas tres instituciones y otras organizaciones que vertebran el sector de las pequeñas empresas -Sefes y Pymec, especialmente- coinciden en no desautorizar al presidente catalán.

La junta directiva del Círculo de Economía opina con unanimidad que si bien la discusión, sobre el calendario no afectará especialmente a la economía del país, sí es importante, en cambio, que cualquier decisión en materia de política económica mantenga la idea central del ajuste. El presidente de esta institución, Josep Piqué, es tajante al respecto: "Se haga como se haga, lo importante es no incorporar a la inevitable prórroga de los Presupuestos del 95 dudas sobre la política restrictiva que debe mantener España. Es fundamental no empeorar la opinión de los mercados internacionales porque cada tentanción expansiva la hemos pagado con importantes primas de riesgo, como ya se vio en la última tormenta monetaria".

La mayoría de los miembros de la junta del Círculo coinciden en señalar que los decretos a incorporar en los Presupuestos prorrogados han de seguir la dirección de mantener los ajustes necesarios tendentes a situar el déficit público de 1996 en el 4,4% exigido para no desviar la economía española de los objetivos marcados por el núcleo duro de la UE. Además, añaden los mismos medios, la liquidación de los Presupuestos de 1995 debe cerrarse con rigor.

La gran patronal, Fomento del Trabajo Nacional, ha matizado su posición en pocos días. Al inicio de la semana pasada la presidencia de Fomento anunciaba en un alambicado comunicado oficial que después, del rechazo de CiU a los Presupuestos, "el Gobierno debe actuar en consecuencia". Era la traducción catalana del último llamamiento de Cuevas a la agitación empresarial en busca de una ruptura definitiva con el Gobierno socialista y la convocatoria de elecciones generales inmediatas. Fomento se alineaba con un eufemismo a la exigencia del presidente de la gran patronal. Días después, el viernes pasado, la organización empresarial catalana convocaba un foro para discutir la fílosofía presupuestaria sin manifestar ningún apremio sobre la convocatoria de elecciones.

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El paso lo dio Alfredo Molinas, quien durante más de dos décadas ha sido presidente de Fomento y ahora aglutina a gran número de patricios de las organizaciones sectoriales de la patronal en tomo a un foro de opinión denominado Sociedad de Estudios Económicos. "Proponemos realizar una reflexión serena sobre los temas económicos del momento, y en particular sobre los Presupuestos del Estado, a pesar del clima de crispación existente", dijo Molinas.

El dirigente empresarial anunció para la próxima semana la celebración de un simposio sobre los Presupuestos del Estado en el que tomarán parte tanto la junta directiva de la entidad -con el presidente Rosell y el secretario general, Juan Pujol, a la cabeza- y un grupo de universitarios, la mayoría vinculados a la agitación ideológica de los círculos del Partido Popular en Cataluña (el catedrátíco Alejandro Pedrós, Juan Francisco Corona, Antoni Fernández Teixidó y el jefe del Servicio de Estudios de Fomento, Joaquín Trigo). "Buscamos iniciar un debate sobre los Presupuestos que movilice a todos los sectores económicos, sindicatos incluidos, y a todas las ramas de la actividad productiva, aunque muchas de ellas están al margen de los avatares de la política. Los Presupuestos expresan un compromiso por un año entre quienes gobiernan y el pueblo. La sociedad debe saber qué van a hacer los políticos que gobiernen y debe conocer si éstos se dejan influir en exceso por las circunstancias del momento", explicó Molinas.

El propio Cristóbal Montoro portavoz de economía del PP en e Congreso, ha actuado como banderín de enganche de algunos sectores empresariales al insistir más en una prórroga que no suponga, un descontrol del déficit que en la urgencia electoral, que también suscribe.

Los empresarios catalanes próximos al Partido Popular atienden más a los discursos de Cristóbal Montoro que a los llamamiento de José María Cuevas. El sector de Fomento más afín a Pujol en cuentra en los matices de Molina un reflejo de su postura.

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