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La congelación de los gastos militares de los países ricos garantizaría la educación y agua de todo el mundo

La congelación de los gastos militares de los países desarrollados y el adecuado reparto de estos excedentes garantizarían la educación, los cuidados sanitarios básicos y el acceso al agua potable en el año 2000 para todos los ciudadanos del mundo. Ésta es una de las propuestas que figuran en el cuarto Informe sobre el Desarrollo Humano (IDH), que acaba de hacer público el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD). Japón figura a la cabeza de los países desarrollados, y Guinea, en último lugar. España se mantiene en el puesto número 23, y ocupa el 15 entre los países europeos.

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La ONU pone énfasis en su informe en el hecho de que el 90% de los habitantes del planeta no son dueños de su destino, a pesar de los recientes cambios democráticos y de la instauración de la economía de mercado en el mundo. De acuerdo con los datos ofrecidos en el estudio, menos de un 10% de la población mundial participa plenamente de la vida política, económica, social y cultural. Preparado por un equipo de economistas independientes, el Informe sobre el Desarrollo Humano en 1993 clasifica los países según el indicador de desarrollo humano, que tiene en cuenta al mismo tiempo factores como la esperanza de vida, el nivel de estudios y el poder adquisitivo de la población.Dentro de una lista de 173 países, Japón ha desplazado a Canadá a la cabeza de esta clasificación, a pesar de que su producto interior bruto (PIB) alcanza el sexto lugar del mundo. En segundo lugar de desarrollo se coloca Canadá, seguido de Noruega, Suiza, Suecia, Estados Unidos, Australia, Francia, Países Bajos y Reino Unido. Barbados, primer país de la zona considerada en vías de desarrollo, ocupa la plaza número 20; España, la 23; Hong Kong, la 24; Uruguay, la 30, y Corea del Sur, la 33. En los últimos puestos, 171, 172 y 173, figuran Afganistán, Sierra Leona y Guinea Ecuatorial, respectivamente, que tienen el índice de desarrollo humano más bajo del mundo.

En el. informe se indica que las minorías étnicas, los pobres, los habitantes de zonas rurales, las mujeres y los minusválidos apenas tienen la posibilidad de mejorar sus condiciones de vida. En esta edición se clasifican las minorías étnicas de Estados Unidos en blancos, negros e hispanos para dejar constancia de que tales minorías no se benefician como debieran de la vida económica y de las ventajas sociales.

La población blanca de Estados Unidos se encuentra en el nivel superior del indicador de desarrollo humano, antes incluso que los japoneses, mientras que la población negra, entre la que la esperanza de vida, los ingresos y el nivel de estudios son inferiores, alcanza tan sólo el lugar 31.

En el estudio se indican las diferencias entre los países desarrollados y los que se encuentran en vías de desarrollo, y los avances que se han producido en estos últimos, en los que se ha logrado que el 70% de la población tenga acceso a servicios de salud. Ello no evita, sin embargo, que al menos 17 millones de personas mueran al día como consecuencia de infecciones, diarreas, malaria o tuberculosis. Por otra parte, el 80% de los 13 millones de infectados por sida - en 1990- vive en el Tercer Mundo.

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