Sadam pide a los kurdos que vuelvan a lrak
En su primer viaje al Kurdistán iraquí desde el final de la guerra del Golfo, el presidente de Irak, Sadam Husein, hizo, a última hora del sábado, un llamamiento a los refugiados kurdos para que regrese a sus casas y no teman por su seguridad. En Erbil, capital administrativa de la región autónoma kurda de Irak, Sadam se dirigió a la población para decir que sólo deben temer el castigo aquellos que han asesinado, violado o robado.
El presidente iraquí, que también visitó la ciudad de Nínive, habló a los habitantes de Erbil en los siguientes términos: "Debéis decir a los que todavía están bajo la influencia de la propaganda de los agentes del extranjero, según la cual las autoridades se vengarán contra ellos, que las instrucciones dadas a los poderes locales son muy claras: no damos garantías a los asesinos, a los violadores del honor del pueblo y a los que han robado bienes públicos o privados; pero no tenemos nada contra los otros". "Aquellos que se han visto obligados a huir de sus casas y a dar su apoyo a los rebeldes en manifestaciones, o han gritado junto a ellos están perdonados", dijo Sadam dirigiéndose a la población kurda."Lo que ha pasado, pasado está. Ahora empezamos de nuevo. Estamos acostumbrados a empezar de nuevo", subrayó Sadam, cuyo Gobierno amplió el pasado jueves en una semana el perdón ofrecido a los rebeldes kurdos. El plazo de la medida, que excluiría a los acusados de asesinato, violación o robo, expira el viernes próximo. Sadam dijo que había ordenado a sus fuerzas de seguridad que no molesten a los refugiados que regresen a sus casas. "No debéis hacerles ni una sola pregunta", señaló. Diarios de Bagdad publicaron ayer en sus páginas diversas fotografías en las que se veía a Sadam Husein rezando en una mezquita o conversando con las autoridades de Erbil.
Algunos periodistas que visitaron Erbil el sábado relataron que numerosos civiles que habían abandonado la ciudad por temor a represalias y a los combates entre los rebeldes y los soldados iraquíes están regresando a sus casas. El éxodo masivo de la ciudad se produlodos días antes de la entrada de las tropas gubernamentales Erbil, que estuvo en poder de los insurgentes durante más de 20 días, temía pagar muy cara esta audacia. Pero el repliegue de los rebeldes hacía el Norte evitó una batalla que, sin duda, hubiera sido muy sangrienta.
Poco honorable
Por su parte, el viceprimer ministro iraquí, Tarek Aziz, manifestó en Jartum, capital de Sudán, que 13.000 kurdos han regresado últimamente a la ciudad de Sulalmanía, al norte de Irak. El periódico Al Zaura, portavoz del partido gubernamental Baaz, señaló que el problema kurdo es utilizado para debilitar la autoridad de Irak y derribar al Gobierno.El diario afirma que es poco honorable establecer un Gobierno kurdo independiente y pequeño, rodeado por Turquía, Irán y la URSS, "ya que estará a merced de los extranjeros y bajo su dominación".Portavoces de los rebeldes kurdos en Damasco acusaron al Ejército iraquí de atacar por tercer día consecutivo las áreas en poder de los insurgentes en el norte de Irak. Un representante del Partido Democrático Kurdo (PDK) aseguró que los guerrilleros rechazaron un ataque con carros blIndados y artillería pesada en Janíqin, cerca de la frontera con Irán, al sur del paralelo 36, debajo del cual, el presidente norteamericano, George Bush, ha advertido a Sadam que no lleve a cabo ninguna acción militar.
La agencia de noticias iraqui INA aseguró ayer que un "grupo de combatientes infiltrado desde Irán mató a un soldado iraquí y secuestró a otros nueve", y acusó a las autoridades de Tcherán de violar el alto el fuego que, bajo los auspicios de la ONU, puso fin a la guerra de ocho años entre ambos países. El embajador iraqui en las Naciones Unidas, Abdel Amir al Aríbari, dirigió una carta al secretario general de la organización internacional, Javier Pérez de Cuéllar, en la que pide la devolución a Irak de los soldados secuestrados en la región de Badra, al sureste de Bagdad.
Por su parte las tropas de EE UU estacionadas en el surde Irak iniciaron ayer su retirada hacia la zona desmilitarizada, próxima a Kuwait, según el Mando central de Estados Unidos en Riad. Se espera que refugiados iraquíes los acompañen. Mientras, las autoridades turcas anunciaron que hoy midan el traslado de unos 20.000 de los 200.000 refugiados en la frontera con Irak, en el campamento de Isikveren a sitios de tránsito en zonas llanas de acceso más fácil.
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