Las fosas comunes de la policía estalinista

Las atrocidades cometidas en la zona de ocupación soviética de Alemania tras la II Guerra Mundial por la NKVD, la policía secreta de Josip Stalin, precursora del KGB, han empezado a surgir brutalmente después de que las elecciones del 18 de marzo acabaran definitivamente con el régimen impuesto por la URSS en esta parte de Alemania. Dos fosas comunes, conteniendo cada una de ellas centenares de esqueletos, han sido descubiertas en las localidades de Neubrandembupg, en el norte, y Schmachtenhagen, a unos 30 kilómetros de Berlín.Lo cierto es que los lugareños sabían de su existencia, pero no se han atrevido a denunciarlo hasta ahora. Según el historiador Dieter Krüger, que explicó que no se hubiera atrevido a hacerlo público hace tan sólo unos meses, las víctimas de los soviéticos eran oficiales nazis de las SS, policías, funcionarios, soldados, e incluso niños: "Todo aquel que era considerado sospechoso de sabotear el avance del Ejército Rojo sobre Berlín".

Cuando el Ejército Rojo ocupó su parte de Alemania, tomó posesión de los campos de concentración nazis para recluir en ellos a los prisioneros de guerra y sospechosos de crímenes contra la humanidad. No existieron garantías judiciales y, además de quienes fueron ejecutados, muchos más murieron de inanición o enfermedad. Se calcula que hasta 70.000 alemanes murieron en estos lugares.