Si triunfa el 'no'

Si Pinochet es derrotado en el plebiscito de hoy -y lo reconoce-, no podrá presentarse como candidato a lapróxima elección presidencial. Pero aun así tendrá importantes cargos en el futuro régimen: será senador vitalicio en su calidad de ex presidente y comandante en jefe del Ejército por ocho años más, y como tal, integrante del Consejo de Seguridad Nacional, que tiene funciones tutelares sobre el próximo presidente.De ganar el no, la Constitución prorroga la presidencia del general hasta el 11 de marzo de 1990, por un año y cinco meses más, pese a su derrota en las urnas. Noventa días antes, el 11 de diciembre de 1989, debe convocar elecciones simultáneas de presidente y del Congreso Nacional, que se efectuarían el 14 de diciembre de 1989.

La oposición, aunque tenga mayoría en el Congreso, estará atada de manos para modificar las bases esenciales de la Constitución: requiere de la voluntad de dos tercios de las Cámaras de Diputados y Senadores y del apoyo del presidente. El mandatario tiene veto, y para insistir, el Congreso requiere tres cuartas partes de sus miembros. Pero, en la práctica, los nueve senadores designados (de un total de 35) más aquellos electos favorables al régimen tendrán la mayoría necesaria para frenar una reforma constitucional.

Para aprobar cualquier reforma constitucional antes de la próxima elección presidencial se requiere un nuevo referéndum y su aprobación previa por la Junta de Gobierno. Sólo un miembro de la Junta -el general Rodolfo Stange, de carabineros- se ha pronunciado abiertamente por una negociación si el no vence.