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El Ayuntamiento de Valencia renuncia a editar como cartel la obra de Alberti sobre la República

Miguel Ángel Villena

El Ayuntamiento de Valencia rectificó ayer su decisión de editar un cartel de Rafael Alberti, que tiene como motivo principal la bandera republicana, tras una reunión que el conseller de Educación y Cultura y vicesecretario general del Partido Socialista del País Valenciano (PSPV-PSOE), Cipriá Ciscar, mantuvo con los responsables culturales de las instituciones valencianas. El cartel de Alberti será editado como serigrafía en una tirada reducida, mientras que el cartel oficial de la muestra Valencia, capital de la República, del que se imprimirán varios miles para que anuncie en la calle el acontecimiento, será obra del pintor valenciano Manuel Boix.

Por otra parte, el Gobierno pretende despolitizar al máximo los actos de conmemoración del cincuentenario del comienzo de la guerra civil y dotar a la celebración de un contenido cultural y académico. Por esta razón los actos principales de esa conmemoración se celebrarán en Valencia y no en Madrid. La polémica entre la Generalitat y el Ayuntamiento en torno al cartel de Alberti ha puesto de relieve que las susceptibilidades están a flor de piel.

Ciscar convocó ayer al director general de Cultura, Emilio Soler, al diputado provincial del área, Jesús Ros, y al delegado de Cultura del Ayuntamiento, Vicent Garcés, todos ellos socialistas, para resolver el conflicto surgido en torno al cartel de Rafael Alberti que la Generalitat se había negado a editar al considerar que la bandera republicana podía resultar conflictiva. El Ayuntamiento había asumido finalmente la edición del cartel de Alberti, en tanto que la Consejería de Cultura, Educación y Ciencia de la Generalitat encargaba otro a Manuel Boix, en el que aparece una cabeza de mujer, representación iconográfica de la República.

Protestas

Posteriormente, la corporación municipal había aceptado imprimir la obra del autor de Marinero en tierra como serigrafía, pero tras las protestas del poeta, que llegó a anunciar que no asistiría a los actos del aniversario, el Ayuntamiento de Valencia anunció el miércoles por la tarde su propósito de editar el polémico cartel como tal.Después de la intervención de Ciscar, la Generalitat se hará cargo de las ediciones y publicaciones de la muestra Valencia, capital de la República, mientras que el Ayuntamiento organizará el congreso de historiadores y el montaje de seis exposiciones sobre la Valencia de la época.

Este periódico trató ayer infructuosamente hablar con el delegado de Cultura municipal, Vicent Garcés, para que explicara las razones del cambio de actitud. Al parecer, la decisión inicial de editar el cartel de Alberti procedió del propio alcalde de Valencia, Ricard Pérez Casado, que ayer no estaba en la ciudad. La Generalitat ha negado en todo momento que la decisión de no imprimir como cartel el dibujo de Alberti, y hacerlo como serigrafía, en una tirada reducida, obedeciera a criterios políticos.

El Gobierno trata de dar un enfoque cultural al aniversario y evitar que el recuerdo de la guerra civil se convierta en un arma arrojadiza en vísperas electorales, según han manifestado distintas fuentes del Ejecutivo y del PSOE. De otro lado, la intención gubernamental apunta asimismo a la concentración del aniversario en la ciudad de Valencia. La presencia del ministro de Cultura, Javier Solana, el día 15 en la inauguración de la Feria del Libro y de los actos de Valencia, capital de la República confirman esta actitud.

La probable asistencia del vicepresidente del Gobierno, Alfonso Guerra, a la clausura del congreso de historiadores y especialistas, que se celebrará entre los días 21 y 25 de abril, orientaría el contenido político que el Gobierno y el partido socialista desean dar a los debates sobre la etapa republicana y la guerra civil. El aniversario en Madrid se limitará a conferencias y mesas redondas en mayo.

Seis exposiciones sobre diversos aspectos sociales, artísticos y ciudadanos de la Valencia de los años treinta, un congreso de historiadores y especialistas y numerosos actos ciudadanos recordarán la efímera capitalidad republicana que la ciudad ostentó durante el otoño de 1936 y varios meses de 1937. Esta etapa coincidió con uno de los momentos de mayor agitación social y política y de mayor esplendor cultural de la capital del País Valenciano, mientras Madrid resistía la ofensiva desplegada por las tropas de Franco.

Los mejores especialistas de este período participarán en el primer congreso histórico que se organiza en España sobre la Segunda República y la contienda civil. El historiador francés Pierre Vilar, especialista en historia de España, pronunciará la conferencia inaugural del congreso que cerrará el autor norteamericano radicado en España, Gabriel Jackson.

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