Sin conflictos por la objeción de conciencia

Los servicios de Ginecología y Obstetricia de los principales hospitales de Cataluña se encontraban el viernes a la expectativa de que entrase en vigor la normativa sobre la aplicación concreta de la ley y sobre la objeción de conciencia. Aunque ésta última se revela como una cuestión delicada, no parece que vaya a provocar en Cataluña especiales conflictos. El Colegio Oficial de Médicos de Barcelona emitió el jueves un comunicado en el que hacía pública su conformidad con las disposiciones emitidas por la Generalitat para garantizar el derecho de los médicos a practicar la objeción de conciencia.A pesar de ello, se mantiene en general una absoluta reserva. El único jefe de departamento que respondió sin ambages a la cuestión fue el doctor Iglesias, del hospital del Mar: "En cuanto recibamos las instrucciones sobre cómo hacerlo, constituiremos la comisión médica que establece la ley. En nuestro departamento nos conocemos todos y no habrá problema".

Donde sí podrían surgir problemas es en la provincia de Tarragona. No se descarta la posibilidad de que en algunos departamentos se produzca una negativa en bloque por la presión indirecta del jefe.

Incidencia mínima

Con ciertas reticencias en algunos casos a facilitar información, en todos las consultas realizadas afloró la extrañeza del personal médico por no haber recibido todavía ninguna solicitud de aborto.El mayor centro obstétrico de la Seguridad Social en Cataluña, la residencia Maternal de la ciudad sanitaria de Valle Hebrón, que cuenta con 310 camas y ha atendido en los últimos cuatro años 32.000 partos, se encontraba el viernes por la tarde a la espera de instrucciones concretas sobre la forma en que se ha de actuar cuando se produzca alguna solicitud. "Por no haber no ha habido ni siquiera una consulta", declaró el doctor Cabaleiro, responsable del centro.

Tampoco se había recibido ninguna solicitud ni en el hospital Clínico ni en el de Sant Pau. Un portavoz del departamento de Ginecología y Obstetricia de este último centro señaló que entre las pacientes no hay en estos momentos ningún caso susceptible de acogerse a los supuestos establecidos por la ley, hecho especialmente significativo pues se trata de un departamento especializado en casos de alto riesgo. Ello demuestra que la incidencia real de la ley será mínima.

Ésta es la opinión en la que coincidieron la mayor parte de los especialistas consultados. "La incidencia será muy baja desde el punto de vista estadístico pues primero hay que circunscribirla a la población embarazada; dentro de ésta, a las gestantes de alto riesgo y aún entre éstas, sólo a las que entren en los supuestos previstos en la ley, que son una mínima parte", dijo el doctor Iglesias.