La Junta de Andalucía se opondrá a la construcción de chalés cerca de la Alhambra hasta que no haya un plan especial

"La opinión de la consejería en el tema de Los Alijares es que no se debe producir por el momento ninguna intervención en la Albambra y en su entorno, hasta que no se redacte un plan urbanístico especial que contemple la problemática del monumento en su totalidad", manifestó ayer a este periódico el titular de Cultura de la Junta de Andalucía, Javier Torres, quien comunicó personalmente al alcalde de la ciudad, Antonio Jara, su disconformidad con el complejo residencial proyectado en la ladera suroccidental de la colina de la Alhambra.

"Este plan especial", añadió Javier Torres, "tendría que plantear lógicamente el problema de los nuevos accesos a la Alhambra, que es un tema urgente en el que el propio ayuntamiento viene trabajando desde hace tiempo así como sentar las bases definitivas de protección del monumento de cara al futuro, indicando claramente cuál es su zona fija de inviolabilidad urbanística y cuáles son las posibilidades de desarrollo de algún tipo de construcción fuera de dicha zona reservada".Tras indicar que el criterio de su departamento no es vinculante para el resto de sus compañeros en el ejecutivo del Gobierno andaluz, que se reunirá hoy en Sevilla bajo la presidencia de José Rodríguez de la Borbolla, el consejero de Cultura afirmó que "no se trata de un probIema de enfrentamiento institucional entre la Junta y el Ayuntamiento de Granada, puesto que la actuación de éste ha sido escriipulosa en todo momento Con la tramitación de la licencia municipal de la proyectada urbanización".

Para Javier Torres, sin embargo, el problema radica en que "nosotros tenemos unas competencias en materia del patrimonio histórico-artístico que es obligación de la Junta de Andalucía defender en todo momento y lugar. Esa fue la razón que me movió, tan pronto tuve conocimiento del tema de Los Alijares, a solicitar sendos informes a la dirección general de Bellas Artes y a la consejería de Política Territorial, para poder adoptar conscientemente una decisión clara al respecto y defenderla con posterioridad ante mis, compañeros del consejo de gobierno".

Monumento amenazado

Aunque el proyecto Los Alijares de la Alhambra -que albergaría un total de 230 viviendas unifamiliares del estilo de los clásicos cármenes morunos granadinos, con una inversión prevista de más de 3.000 millones de pesetas- cuenta con su correspondiente licencia municipal de edificación, concedida tras la cumplimentación por sus promotores de todos los requisitos legales exigibles, la publicación de los artículos aparecidos el pasado sábado en el suplemento de Artes de este periódico, bajo el título genérico de Un monumento amenazado, ha originado una enorme polémica en Granada, ciudad tradicionalmente sensible a cualquier tipo de operación que pueda parecer especulativa.La polémica ha hecho recordar el caso del Carmen de los Mártires, a uno de cuyos laterales iría precisamente ubicada la proyectada urbanización y que se mantiene todavía demasiado fresco en la memoria colectiva de los granadinos, que hace diez años sufrieron lo suyo para abortar la construcción de un hotel de cinco estrellas en uno de los más bellos jardines de España.

Colina abandonada

Sin embargo, tanto la corporación actual -algunos de cuyos miembros se significaron de manera especial en su momento en la lucha para la defensa. del Carmen de los Mártires- como la empresa Ávila Rojas y el arquitecto autor del proyecto de Los Alijares, Eduardo Ortiz, niegan cualquier vínculo comparativo con aquel triste asunto y aseguran que la urbanización que promueven no supondrá perjuicio alguno para el conjunto monumentál de la Alhambra y el Generalife."Los terrenos donde irían el complejo residencial se hallan en una colina actualmente abandonada, y ya he entregado 150 millones de pesetas, para garantizar la dotación de depósitos de agua para toda la zona del Barranco del Abogado", ha manifestado el empresario José Ávila, quien también se comprometió en su día con el ayuntamiento a financiar buena parte de los 100 millones de pesetas presupuestados para la construcción de una nueva vía de acceso a la Alhambra desde la carretera de Sierra Nevada. "Los terrenos se encuentran lo suficientemente retirados del conjunto monumental", afirma el constructor, "como para no dañar con el proyecto ni la integridad física ni el entorno paisajístico de la zona".

Por su parte, el teniente de alcalde delegado de Urbanismo, José Olea, cree que las posturas encontradas en.el polémico caso de Los Alijares tienen su origen "en los recelos despertados en determinados medios culturales andaluces ante el expediente incoado por el ayuntamiento granadino contra las obras del Museo Hispano-Musulmán, realizadas sin licencia municipal en el propio recinto de la Alhambra, junto a una de las explanadas de acceso a los jardines del Generalife".