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Chernienko advierte que Europa occidental sacrifica su seguridad a las "ambiciones imperiales de Estados Unidos"

Pilar Bonet

PILAR BONET El máximo dirigente soviético, Constantin Chernienko -a pesar de considerar que la distensión "tiene raíces profundas"-, acusó ayer a Estados Unidos de pretender la "dominación del mundo", y afirmó que las recientes invitaciones de Washington al diálogo no responden a la actuación norteamericana respecto a la URSS y "sólo pueden tomarse en serio si van acompañadas de acciones reales". Chernienko señaló que ningún "potencial agresor" de la URSS podría evitar una "respuesta devastadora", y advirtió que Europa occidental está sacrificando su seguridad a las "ambiciones imperiales de Washington".

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La Casa Blanca reaccionó inmediatament e al discurso con una declaración del portavoz presidencial, Larry Speakes, en el sentido de que las palabras de Chernienko no modifican las perspectivas de las relaciones entre Washington y Moscú. El propio presidente Ronald Reagan aseguró anoche que Estados Unidos y la Unión Soviética "terminarían por encontrarse a medio camino" para conseguir una reducción del armamento nuclear, pero advirtió a los políticos que participan en la campañan electoral norteamericana que no interfieran en su programa para aumentar el poder militar de Estados Unidos.En una intervención en el Palacio de Congresos del Kremlin, difundida en directo por la televisión soviética, Constantin Chernienko expuso las líneas básicas de la política del Partido Comunista de la Unión Soviética (PCUS), con especíal atención a los temas económicos.

El dirigente soviético se interrumpió varias veces, con ataques de tos y ahogo, a lo largo de los 50 minutos que duró su discurso, colofón y cierre de la campaña electoral para los comicios al Soviet Supremo del próximo día 4 de marzo, en las que es candidato.

En su primera intervención pública no vinculada a la muerte de su predecesor, el secretario general del PCUS acusó a EE UU de haber transformado su participación en las conversaciones sobre armas nucleares, tanto de alcance medio como tácticas, en un "instrumento de propaganda para camuflar la carrera armamentista y la política de guerra fría. Nosotros", afirmó, "no participaremos en este juego".

Estados Unidos utilizó las conversaciones sobre euromisiles y armas nucleares estratégicas de Ginebra para instalar sus misiles en Europa, dijo Chernienko. "El camino para elaborar un acuerdo mutuamente aceptable pasa por la eliminación de estos obstáculos, lo que supondría también la eliminación de la necesidad de nuestras contramedidas", señaló el líder soviético.

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En opinión de Chernienko, Washington tiene "muchas oportunidades" de probar "con hechos" sus deseos de paz. Como ejemplo, el dirigente soviético sugirió la aceritación de alguna de las propuestas presentadas por su país en diversos foros internacionales, y citó entre ellas la ratificación de los tratados sobre la limitación de pruebas nucleares subterráneas, el acuerdo sobre la renuncia a la militarización del espaobio exterior, la congelación mutua de armamento nuclear y el acuerdo de prohibición de las armas quí micas.

"No se excluye", dijo Chernienko, "que el alcanzar un acuerdo en alguno de estos temas señalara el comienzo de un cambio sustancial y real en las relaciones soviéticonorteamericanas y en la situación internacional en su conjunto". Chernienko añadió: "Nosotros desearíamos, un cambio sustancial semejante.. Ahora le toca actuar a Washington".

Total apoyo a Cuba

En los últimos años, la política de "flagrante militarismo" de Washington se ha puesto de manifiesto en situaciones como la invasión de Líbano, la ocupación de Granada, la guerra encubierta contra Nicaragua, la amenaza a Siria y la transfarmación de Europa occidental en un campo de despegue de los misiles nucleares que apuntan a la URSS y a sus aliados, dijo Chernienko.

El dirigente soviético acuáó a los "políticos imperialistas" de tratar de minar la cohesión de los países socialistas. En este ámbito, Chernienko citó a Cuba y acusó a EE UU de utilizar el bloqueo económico y las amenazas militares contra este país. La URSS "apoya de forma decidida" a Cuba y "esta rá a su lado tanto"en las duras como en las maduras".

Refiriéndose a China, Chernienko dijo que las consultas políticas entre ambos países evidencian que "existen diferencias en varias cuestiones de principio". En una alusión velada a Vietnam, Chernienko dijo que la URSS y China no pueden "concluir ningún acuerdo en perjuicio de los intereses de terceros países".

El intercambio de opiniones continúa y es útil. La URSS es partidaria del incremento de los contactos a un nivel aceptable para ambos lados, aunque la normalización gradual en las relaciones económicas, culturales y científicas no sea "del gusto" de quienes pretenden "beneficiarse del agravamiento de las relaciones entre la URSS y China". Las conversaciones con los dirigentes de muchas delegaciones extranjeras que asistieron al funeral de Andropov confirmaron, según Chernienko, que la gente "quiere la paz y la tranquilidad, y no la histeria de la guerra". Chernienko elogió a su predecesor, Yuri Andropov, definiéndole como un dirigente de tipo leninista que no podía soportar la rutina y el estereotipo y que sabía vencer la inercia de la gente.

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Sobre la firma

Pilar Bonet
Es periodista y analista. Durante 34 años fue corresponsal de EL PAÍS en la URSS, Rusia y espacio postsoviético.

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