La CEE acepta importar un vino de EE UU que no es vino, según sus definiciones
La CEE ha aceptado importar un vino estadounidense que en realidad no es lo que ella califica de vino en sus reglamentos. Todo sea para torear unas posibles represalias norteamericanas contra las importaciones en aquel país de vinos comunitarios. "¿Qué es el vino?", se preguntaba ayer un portavoz de la Comisión Europea, para el cual "el concepto del vino no se limita al líquido producido según nuestros métodos". Baco se hace comerciante.El problema son los distintos reglamentos imperantes para la fabricación y comercialización de la bebida que emborrachó a Noé. En contra de lo que ocurre en EE UU, la CEE no admite la utilización de aceite mineral para completar los barriles y evitar el contacto del producto con el aire (aceite que ha de quedar posteriormente eliminado). La CEE se muestra asimismo reservada sobre el uso de los transformadores de iones para el tratamiento del vino. "Nada de esto implica riesgos para 11 salud. Había que contemplar algunas excepciones en las disposiciones comunitarias. Éstas no son una biblia", explicó el citado portavoz,
¿Seguro? La razón de la flexibilidad comunitaria está en las cifras: la CEE exporta 50 veces más vino -la mitad italiano- a EE UU que éste hacia la Comunidad. Se trata de mantener esta lucrativa proporción. Pero puede ser el primer paso para que el vino deje de ser vino. En el intercambio de cartas en las que quedó plasmado este acuerdo EE UU se mostró dispuesto a no tolerar la erosión de las indicaciones geográficas en donominaciones genéricas.
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