El impuesto de lujo sobre obras de artistas españoles vivos será eliminado

El impuesto de lujo sobre obras de arte, que hasta el momento era del 22%, dejará de existir de acuerdo con el proyecto de ley de Presupuestos Generales del Estado que ha sido presentado al Parlamento. La medida afecta a los artistas españoles vivos. En virtud de la nueva disposición, se decía ayer en medios artísticos, se dinamizará el comercio de la obra de arte y se potenciará el coleccionismo en España.

La medida está contenida en el artículo 32 del mencionado proyecto de ley, y dice que "a partir de la entrada en vigor de la presente ley quedan exentas, en todos los casos, las adquisiciones de pinturas, esculturas y grabados originales" siempre que sus autores sean "artistas españoles vivos en el momento de la transmisión".El impuesto existía desde la posguerra. Su desaparición supone, según medios artísticos, la posibilidad de dinamizar el mercado del arte. Ésta era una aspiración ampliamente sentida entre galeristas y artistas plásticos, cuyas asociaciones sindicales la habían demandado sobre todo desde que comenzó la transición democrática.

Niveles ventajosos

La desaparición del impuesto de lujo pone al mercado artístico español en niveles más ventajosos que los de la mayoría de los países europeos, donde el impuesto de lujo sobre obras de arte existe aún y oscila entre el 3 y el 13%.

Aunque la medida se ha calificado de 'histórica', se señalaba ayer que su influencia sobre la recaudación del Estado va a ser mínima, porque ya había sistemas para eludir, de hecho, el mencionado impuesto. Al no estar los artistas afectados por el impuesto, ellos mismos vendían las obras directamente; cuando lo hacían a través de galerías de arte, éstas podían argüir que las obras se hallaban en depósito.

Sin embargo, los que subrayan la medida como un hecho 'revolucionario' en el mercado del arte estiman que se quita a la obra artística su identidad de objeto comercial lujoso y se le da el valor que siempre tuvo, es decir una significación esencialmente de transmisión y popularización de la cultura estética.

Circulación de las obras

La medida no abaratará esencialmente la obra de arte, pero la hará más asequible al hacer más fluida su circulación. Asimismo, se cree que puede lograrse una mayor transparencia del mercado al eliminarse los trucos que hasta ahora se utilizaban para evitar el impuesto del 22% sobre los cuadros comprados.

Por otra parte, esta medida puede favorecer el coleccionismo privado y la posibilidad de que el Estado, como comprador de obra de arte, incremente su patrimonio. Asimismo, las galerías podrán comprar obra de arte de manera directa.

Hasta que esta medida sea aprobada en el Parlamento, España será el único país europeo que mantenga sobre la compra de obras de arte un impuesto directamente de lujo, tanto para las obras que se compren en España como para las que se adquieran en el extranjero.

España ha mantenido los tipos impositivos más altos de Europa en este terreno. Ello ha producido situaciones anómalas en el comercio artístico en nuestro país, puesto que se ponían trabas a una de manda normal y proliferaban los fraudes, que afectaban a la fluida circulación de obras de arte.

Un aspecto de esta situación, de todos modos, será mantenido, de acuerdo con el proyecto de ley, puesto que se especifica que la medida afecta a los autores que sean artistas españoles vivos". Esta disposición deja fuera de la nueva medida a los artistas extranjeros que se relacionen comercialmente con España.

La supresión del impuesto de lujo sobre las obras de arte ha sido reivindicado por artistas y galeristas como una medida coherente con la idea de libre circulación de obras de arte apoyada por la Unesco.

La supresión total del impuesto no era esperada en los círculos artísticos españoles, donde se creía que la medida podía acercarse, simplemente, al porcentaje que se mantiene en diversos países europeos.