Polémico traslado del 'togado de Periate' a un museo de Granada

La estatua romana conocida con el nombre de El togado de Periate, hallada el pasado mes de febrero en el término municipal de la localidad granadina de Píñar, ha sido trasladada, por orden gubernativa, al Museo Arqueológico de Granada desde la oficina principal de la Caja General de Ahorros, donde había sido depositada por su descubridor, Antonio Martínez Fuentes.

"El estado actual de conservación de la pieza es bueno", ha declarado el gobernador civil, Luis Puente, en el curso de una conferencia de Prensa convocada para anunciar la toma de posesión oficial de la estatua por parte del Estado, en las personas de la directora del Museo, Angela Mendoza, y el director provincial de Cultura, Vicente González Barberán."La decisión de ordenar el traslado de la escultura", añadió el gobernador civil, "se ha debido a dos razones fundamentales: la primera, que el pueblo de Granada tiene derecho a ver la estatua cuando quiera y la segunda, que los técnicos especialistas que más saben sobre el tema están en el Museo Arqueólogico".

Aunque Luis Puente dijo que no habían existido dificultades por parte de la Caja General de Ahorros para la entrega del Togado, un portavoz de la misma afirmó que la dirección de la entidad financiera había mostrado su disconformidad con la decisión gubernativa, "por no contar para el traslado con la autorización correspondiente de la persona que efectuó el depósito de la estatua, ni con una orden judicial".

El Togado de Periate fue hallado de manera casual el pasado día 24 de febrero, cuando unos trabajadores abrían una zanja para la conducción de agua y electricidad en el campo con una máquina retroexcavadora. La estatuta se encontraba enterrada a menos de un metro de profundidad y fue bautizada con el nombre que actualmente se la conoce por haber aparecido en el cortijo de Periate, situado a tres kilómetros de la localidad de Iznalloz, dentro del término municipal de Píñar. Desde entonces se encontraba en la oficina principal de la Caja General de Ahorros de Granada, donde fue depositada por el dueño de la fin.ea en que se descubrió, Antonio Martínez Fuentes.

Se trata de una estatua romana de bronce, de 1,60 metros de altura y unos 150 kilogramos de peso. Su importancia radica en su naturaleza metálica, ya que las figuras togadas de la época romana suelen aparecer en mármol y no en bronce. Es un retrato hueco, que parece corresponder a la figura de un patricio romano con poder administrativo y delegación imperial. Mantiene una postura elegante, con una pierna ligeramente doblada.

En la estatua se puede apreciar, asimismo, que el vestido fue realizado con posterioridad y soldado después al cuerpo. Las huellas de las plantas de los pies indican, por otra parte, que la pieza estuvo sujeta a un pedestal. La estatua ha sido fechada en el siglo III de la era cristiana, ya que las figuras barbadas de sus características no se generalizaron hasta la época del emperador Adriano, y tanto la toga como el tipo hacen pensar en esta fecha, de, acuerdo con la directora del Museo Arqueológico, Angela Mendoza.