El general Bignone somete al Ejército el nuevo Gobierno argentino

El presidente designado general Reynaldo Bignone someterá hoy a sus colegas del Ejército los nombres de quienes integrarán el equipo que ha escogido para dirigir la etapa que se abrirá en Argentina cuando asuma la presidencia el próximo 1 de julio. Al parecer, algunos de esos ministros serán los mismos que componían el Gabinete de Leopoldo Galtieri.

Sin embargo las tres carteras principales, Interior, Relaciones Exteriores y Economía, han sido ofrecidas a hombres nuevos aunque no de ideas nuevas. Las dos primeras han recaído en el general Llamin Reston, ex ministro de Trabajo y actual comandante del cuarto ejército, a quien corresponderá la responsabilidad de organizar y permitir la campaña electoral con elecciones honestas y el embajador en Venezuela y presidente honorario del Partido Liberal de Corrientes, Juan Ramón Aguirre Lanari, designado fundamentalmente para orientar la política exterior Argentina hacía Latinoamérica.Jose María Dagnino Pastore, ex ministro de Hacienda con Juan Carlos Onganía, partidario de un liberalismo económico que los sectores productivos de la nación quieren abandonar, ha condicionado su aceptación a obtener previamente el apoyo de los partidos políticos y a que sea nombrado ministro de Obras Públicas su colaborador, Conrado Bauer.

En previsión de una negativa de Dagnino, la cartera de Economía le fue ofrecida también al economista Domingo Cavallo, que en los últimos días de 1981, cuando el presidente Roberto Viola dejó el cargo al general Tomás Liendo, fue ministro de Economía por cinco días y trató de imponer medidas de control financiero y de cambio exactamente opuestas a las que razonablemente se podría pensar que propondrá Dagnino.

La formación del Gobierno parece haber dejado ya de interesar a la población que ha vuelto su atención al Mundial de fútbol, por considerar que ni de los actuales políticos ni de los militares se pueden esperar grandes cambios o en todo caso cambios a la altura de las circunstancias.

Plan económico

Las líneas básicas del plan económico de Bignone, según creía saber ayer el diario La Nación, serán: devaluación de la moneda hasta fijar la paridad del dólar en 20.000 pesos (actualmente es de 15.500), mantener el control de cambios hasta que se llegue a arreglos con los acreedores exteriores, aumento de los salarios base para el sector privado y público en la misma medida de la amplitud de la devaluación, reducción de las tasas de interés, establecimiento de sistema de redescuento para aumentar la liquidez, refinanciación de la deuda exterior, que a fines de año habrá alcanzado los 40.000 millones de dólares, con el auxilio ya sea del Fondo Monetario Internacional o mediante la obtención de créditos a largo plazo, actualización de las tarifas de los servicios públicos y los precios de los combustibles.Según algunos economistas, sin embargo, la aplicación de una línea económica como la descrita, que en parte retorna los planteamientos de la Multipartidaria, podría llevar a que en Argentina, para fines de año, la inflación haya alcanzado índices del 350%.

Fuentes militares no quisieron ayer confirmar o desmentir las informaciones según las cuales el Gobierno de Buenos Aires ha aceptado la resolución 502 del 3 de abril del Consejo de Seguridad de la ONU, que preveía la retirada de las tropas argentinas de las Malvinas, la aceptación del cese del fuego y el inicio de negociaciones.

Ayer, y como prueba de que aún quedan reflejos del inmediato pasado, las organizaciones defensoras de los derechos humanos habían organizado una manifestación en la plaza de Mayo en solicitud de una entrevista con el presidente interino y actual ministro del Interior, general Alfredo Saint Jean para pedirle una investigación de dos nuevos casos de desaparecidos. El hines de la semana pasada desapareció en Buenos Aires Elgardo Cassanc, y el martes le tocaba el turno, en Córdoba, al dirigente sindical Miguel Angel Plá. La asamblea permanente de los derechos humanos, el centro de estudios sociales y legales, los familiares de desaparecí dos y prisioneros políticos, y las madres de la plaza de Mayo, participaron en la manifestación.

El general Reynaldo Bignone había dicho la semana pasada durante su reunión con los políticos, al ser preguntado al respecto, que no recordaba que: el Gobierno se hubiese comprometido a publicar ninguna lista de desaparecidos, de la misma manera que afirmaba no estar en condiciones de fijar fecha alguna para el levantamiento del estado de sitio vigente desde 1974.

Esto último ha sido subrayado por las grandes centrales sindicales, la verdadera fuerza política argentina, a quienes de momento no se extiende el levantamiento de la prohibición de los partidos políticos a partir del 1 de julio.