Reacciones favorables y protestas vascas

El anuncio de la venida definitiva a España del cuadro Guernica, de Picasso, ha suscitado los primeros comentarios. Todos expresan satisfacción por el traslado, si bien el Partido Nacionalista Vasco protesta por su instalación en Madrid. José Antonio Aspuru, secretario del Euskadi Buru Batzar, máximo organismo del Partido Nacionalista Vasco, ha declarado a Efe: «Repetimos lo que un día dijo el PNV: nosotros pusimos los muertos y ellos disfrutan del cuadro. Ante la llegada del Guernica al Estado español, el PNV propugna que se cumpla lo que en su día fue votado en el Parlamento vasco».

Pío Cabanillas, ministro de Justicia, manifestó a Europa Press: «La llegada del Guernica a España significa la terminación de un proceso que inicié en el verano de 1977, muy poco tiempo después de hacerme cargo del Ministerio de Cultura. La obtención del cuadro fue uno de mis objetivos principales».

Simón Sánchez Montero, miembro de los comités central y ejecutivo del Partido Comunista de España (PCE), manifestó, en nota difundida por el gabinete de Prensa de este partido: «Este hecho me produce una gran satisfacción por el profundo significado antifascista y democrático de la obra».