Tusell asegura que el patrimonio estatal está mejor custodiado que el eclesiástico
El director general de Bellas Artes, Archivos y Bibliotecas, del Ministerio de Cultura, Javier Tusell, aseguró ayer que los bienes eclesiásticos están menos protegidos que las colecciones custodiadas por el Estado, en especial a partir de un programa de seguridad que ha supuesto una inversión de trescientos millones de pesetas.La Administración tiene como objetivo principal la protección de las obras y objetos depositados en los museos estatales y colabora, en la medida de sus recursos, en la protección de las que se encuentran en recintos eclesiásticos, aunque la responsabilidad fundamental en la seguridad corresponde a los poseedores de las obras de arte.
Las diferencias existentes en las medidas de seguridad para los bienes de la Iglesia y los del Estado se debe, según Javier Tusell, a la limitación de medios económicos por parte de la Iglesia y también a la falta de colaboración entre ambas instituciones, «que no afecta al caso concreto de la colaboración muy grata entre el obispo de Zamora y el Ministerio de Cultura».
Javier Tusell sostiene que las obras de arte sacro, como supuesto ideal, deben ser contempladas en los mismos lugares donde fueron creadas, tanto desde el punto de vista litúrgico como de conservación. En los casos de deficientes medidas de seguridad, las obras deberían agruparse en museos comarcales y diocesanos, como ocurre ya en varias provincias. Recuerda casos concretos, últimamente en la provincia de Zamora y en Frómista, de resistencia por parte de la población al traslado de obras de arte a otros lugares.
La colaboración entre el Estado y la Iglesia en materia de conservación de obras de arte «avanza lentamente», a través de una comisión mixta, centrada en la elaboración del inventario y en las subvenciones.
