‘La bestia’: el universo de Henry James vira hacia un futuro en torno a la inteligencia artificial y a los ‘incel’
La nueva película de Bertrand Bonello es una apuesta valiente y con ciertos apuntes de interés, pero no tiene la prosa cinematográfica elegante y profunda del texto del escritor estadounidense
Que dos directores franceses de una generación parecida —Patric Chiha, de 49 años, y Bertrand Bonello, de 55— hayan adaptado en un mismo año, el pasado 2023, un relato de Henry James que nunca se había llevado antes al cine de forma unitaria da mucho que pensar. Que ambas películas —La bestia en la jungla, de Chiha, y The Beast (La bestia), de Bonello— se hayan estrenado en España con un intervalo de menos de tres semanas da para festín de los admiradores de la prosa elevada, profunda y alambicada del autor estadounidense. Y ello pese a que ninguna de las dos acaba resultando una buena película, aun siendo apuestas valientes y con ciertos apuntes de interés, y todavía menos obras cinematográficas a la altura de la literaria de James.
La bestia en la jungla, relato publicado por James en 1903, es una reflexión amorosa que deriva hacia el laberinto emocional y la disquisición metafísica. Una maravilla en 50 páginas que, de un modo mucho más conceptual que específico, vienen a contar la historia de encuentros a través de los tiempos de un hombre y una mujer en los que cabe el amor, pero que nunca se concreta. Un texto poco menos que imposible para su adaptación al cine, de modo que no es extraño que nadie se hubiera atrevido antes, salvo otro francés, este mítico, François Truffaut, que entresacó algunos de sus aspectos para su película La habitación verde (1978), aunque conjuntándolos con otros dos cuentos de James en torno a las (des)uniones sentimentales: El altar de los muertos y Los amigos de los amigos.
Que Chiha, en su totalidad, y Bonello, en parte, hayan ambientado en discotecas y clubes nocturnos esos encuentros a través de los tiempos del hombre y de la mujer da ya para premio (al espionaje industrial y artístico). De todos modos, Bonello vira el género cinematográfico hacia la ciencia ficción a través de una distopía ambientada en tres tiempos: principios del siglo XX, cuando se publicó el relato, el año 2014 y un 2044 posterior a una guerra civil y a una tragedia comenzada en 2025. Los sucesivos encuentros del cuento están en la película, así como el elemento metafísico, esa bestia en la jungla del título, agazapada para actuar —”¿qué podía ser esa cosa que debía ocurrir, al fin y a la postre, sino justamente la que ya había empezado a ocurrir?”, en palabras de James—. Pero la película, como también le ocurría a la de Chiha, no tiene la prosa cinematográfica elegante y profunda del texto de James.
Bonello apunta en el diálogo a la esencia del escritor, “un sentimiento ominoso de que algo raro, inusual y fatal ocurrirá antes o después”, aunque cambiando el punto de vista desde el protagonismo masculino al femenino. Sin embargo, se acaba perdiendo con una reflexión sobre la inteligencia artificial con algunos apuntes de interés (ese 67% de paro causado por la evolución en demasiados trabajos, y la maquiavélica frase del ideólogo del futuro, que dicta que en el porvenir “no será necesaria la gente inteligente”), y termina derivando hacia una especie de David Lynch de saldo, demasiado inspirado en su imaginería, sus colores, sus ambientes y sus músicas, aunque sin su capacidad para la inquietud.
Queda, al menos, un trecho en el que, con claras reminiscencias de La jetée (1962), de Chris Marker, cuenta una parte del relato a base de fotogramas sin movimiento, con París convertida en una nueva Venecia anegada por las aguas, y potentes imágenes al estilo de los pioneros fotográficos de principios del siglo XX. Y también una interesante actualización de la esencia del cuento de James en torno al celibato involuntario, a los llamados incel, hombres que se dicen incapaces de tener relaciones sentimentales o sexuales con mujeres, aunque ese sería su deseo. Pero, como buena parte de la película, se pierde en una estructura más incomprensible que compleja y en un abigarramiento temático más pretencioso que fascinante.
La bestia
Dirección: Bertrand Bonello.
Intérpretes: Léa Seydoux, George MacKay, Dasha Nekrasova, Julia Faure.
Género: ciencia ficción. Francia, 2023.
Duración: 146 minutos.
Estreno: 27 de marzo.
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