Medem: "Estoy bajo sospecha por romper el pensamiento único"
El documental 'La pelota vasca. La piel contra la piedra' se estrena este viernes
El director Julio Medem ha asegurado que su última película, La pelota vasca. La piel contra la piedra le ha ha colocado de forma injustificada "bajo sospecha de ser proetarra", pese a que la cinta contiene un mensaje claro de "rechazo a la violencia". Según Medem, las críticas son fruto de su intento por romper "el pensamiento único". Tras su paso por el Festival de San Sebastián y en vísperas del estreno el próximo viernes, Medem ha presentado esta mañana el documental a la prensa en un cine de Madrid.
Prueba de la controversia que ha su documental de entrevistas "sobre el conflicto vasco", es que la productora ha tenido que habilitar dos salas para la exhibición ante los numerosos periodistas acreditados y, además, se han podido verse varios informadores acompañados de guardaespaldas. Medem se ha mostrado disgustado por las acusaciones de filoetarra que ha recibido estos días y la tormenta "desproporcionada" que ha levantado el film, que aseguró que le ha hecho vivir días "espantosos" desde que surgieron las primeras críticas por parte de dos personas que aparecen en él documental, los miembros del Foro de Ermua Gotzone Mora e Iñaki Ezkerra.
Ante los reproches que ha recibido, ha afirmado que su intención ha sido dar voz al mayor número posible de personas de todo el espectro ideológico vasco, desde un doble compromiso "con la no violencia y el diálogo, por ese orden". "No hay ni media tibieza con el terrorismo", ha subrayado. El autor de Lucía y el sexo ha indicado, para quienes puedan albergar dudas, que no es nacionalista y que no quiere una patria única nacionalista con un "pensamiento único". Medem se ha definido como una persona "de izquierdas" que cree que la autodeterminación ha de ser un paso en el hallazgo de la paz en Euskadi.
Condena y diálogo
El director que la película puede dar la impresión de sesgada, pero porque ha intentado sin éxito incluir testimonios de los dos "extremos" del conflicto, el PP y el radicalismo abertzale de ETA, así como de varios intelectuales que declinaron participar. En concreto, el filósofo Fernando Savater, de quien ha señalado que le da "pena" que no haya querido dar su opinión. "Reconozo ingenuamente haber pensado que estas personas habrían lamentado no estar".
En su opinión, algunos de los personajes que no han querido estar en la cinta pueden haber tenido como propósito "boicotear" la obra para que así pudiera ser tachada precisamente de tendenciosa. Sin embargo, su conclusión es clara: "al menos terceras partes" de la sociedad vasca salen representadas en las casi dos horas de metraje. Ahora cree que ha llegado el turno de los espectadores y él no quiere avivar más la polémica. Por eso, cuando se le pregunta por la petición que le ha hecho Mora para que se supriman sus palabras de la cinta, dice que eso corresponde ahora decidirlo a los abogados.
La película está realizada, según Medem, con dos compromisos, primero la condena de la violencia y luego la invitación al diálogo, y forma parte de un proyecto que integra un largometraje de 115 minutos, una serie para televisión, un DVD de cinco horas de duración y un libro de entrevistas. El documental para grandes salas de cine ofrece 70 entrevistas de personajes diversos, desde víctimas de ETA, como Eduardo Madina, a familiares de presos de la banda terrorista o una denunciante de torturas a manos de la Guardia Civil, además de músicos como Fermín Muguruza o escritores como Bernardo Atxaga. También nacionalistas como Xavier Arzalluz o Carlos Garaicoetxea, socialistas como Felipe González o Patxi López, y también el líder de Batasuna, Arnaldo Otegi, aunque ninguno del PP.
Babelia
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