Gijón quiere convertirse en una ciudad realmente inteligente
T-Systems acompañará al Ayuntamiento en el proyecto Gijón-In para la digitalización del municipio gracias al impulso del ‘big data’ y la creación de un tejido empresarial tecnológico en la zona
Una de las batallas recientes en las ciudades es la de convertirse en inteligentes. Pero no basta con atribuirse una etiqueta sin más, sino que hay que demostrarlo. Las llamadas smart cities están cada vez más de moda. Se ha convertido en un apellido frecuente de los Ayuntamientos, aunque, en ciertas ocasiones, vacío de significado. Gijón no quiere verse en esta situación. Pretende ser inteligente con todas las letras. Con el proyecto Gijón-In, promovido por el consistorio y Red.es y puesto en marcha por T-Systems, filial del Grupo Deutsche Telekom, el municipio ha apostado decididamente por la digitalización. El big data, el internet de las cosas y las tecnologías de la información serán sus grandes aliados en esta aventura.
Gijón-In, que durante tres años desarrollará hasta 22 iniciativas diferentes, sitúa en el centro de su inteligencia a los habitantes. Para lograrlo, tal y como explica José Muñoz, responsable del proyecto de T-Systems, la gestión de datos resulta trascendental. “A diferencia de otras smart cities, la propiedad del big data será de la ciudad y sus vecinos. Es el propio Ayuntamiento el que lo tratará coherentemente y lo relacionará con otras variables como el tráfico o la calidad del aire”, explica. Se trata de una diferencia sustancial porque, en ciertas ocasiones, las empresas concesionarias aportan información irrelevante y sin tratar. En este caso, el consistorio obtendrá sus propias conclusiones para mejorar los servicios y gestionar mejor la ciudad en un futuro.
Para evitar que suene muy abstracto aquello de la digitalización, los gijoneses comprobarán por ellos mismos cómo Gijón-In va transformando su relación con la ciudad. Aparte de disponer de una app para informarse sobre el estado del mobiliario urbano y a través de la que controlar las incidencias abiertas, dispondrán de un portal de open data para consultar la gestión del municipio. Los trámites con la Administración también emprenderán un nuevo rumbo. La comunicación con el Ayuntamiento cada vez será más electrónica. “El futuro de una smart city discurre por ser eficiente en la explotación de datos y saber lo que hace y consume. A partir de aquí, es más fácil mejorar los servicios y el coste de las actividades públicas”, sostiene Muñoz.
Desde los impulsores del proyecto mantienen que su idea está lejos de sensorizar la ciudad por una mera moda. Detrás del big data, el internet de las cosas en cubos de basura, control de calidad del aire y movilidad urbana hay un plan de gestión inteligente de Gijón. Esto se traducirá, por ejemplo, en que la red de autobuses municipales circulará en función de la congestión de las rutas. Si en una línea se detecta que hay gran afluencia de viajeros, se reforzará el servicio y viceversa. Lo mismo sucederá con el alumbrado público. Hasta 3.500 farolas contarán con dispositivos LED de tal forma que un sensor regulará el flujo de luz. Que amanece un día nublado, mayor iluminación. “Es la mejor manera de optimizar los recursos públicos”, argumenta Muñoz.
Impulso del tejido tecnológico
Gijón-In pretende trascender los límites de la gestión urbana. El objetivo del proyecto es también habilitar un entorno para la innovación y mejora del tejido empresarial de tecnologías de la información de la localidad asturiana para que puedan crear proyectos alrededor de esta iniciativa. “Las empresas y la universidad tienen que potenciar este ecosistema. Queremos que exporten sus propias soluciones y conviertan Gijón en un polo de innovación más allá de lo ya previsto en este plan”, comenta el responsable de T-Systems. Con el fin de conseguirlo, tanto ciudadanos como organizaciones contarán con talleres y cursos que les adentren en el mundo del acceso a los datos abiertos y las smart cities.
Un gran apoyo para que, en un futuro cercano, estos próximos tres años no queden en papel mojado son los más pequeños de la localidad. Gijón-In domotizará cuatro colegios y pondrá en marcha un concurso con la intención de que los niños se acostumbren a manejar aplicaciones relacionadas con los datos. “Competirán para saber qué centro consume más electricidad o genera menos residuos. Así es más sencillo que adopten cuanto antes y comprendan la tecnología que les acompañará mientras vivan en su ciudad”, recalca Muñoz a la vez que desea que todo esto sirva para convertir al municipio en un referente nacional e internacional.
El turismo también se beneficiará de esta conversión tecnológica. Con el impulso de todos los nuevos servicios, los visitantes descubrirán la localidad de forma más personalizada d gracias a la implantación de canales directos de comunicación. Gijón-In, a partir de una visión integral de la transformación digital, quiere convertir a la ciudad en realmente inteligente. Ahora es el turno de los habitantes para saber si la etiqueta de smart es real o quedan algunos flecos pendientes. Lo que está claro es que todos los implicados tendrán que adaptarse en los siguientes 36 meses a un nuevo entorno en el que la tecnología irá impregnando las calles de este rincón de Asturias.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.