![](https://imagenes.elpais.com/resizer/v2/TJY3CGBEAVMFXEE5NI2E765YGI.jpg?auth=b55c5d0793df8a965575bf10e6eb2133e2b2a14d49707e5c8b8ce6579646985e&width=414)
Cuatro cosas que te harán tan feliz como el dinero (y el sexo solo es una de ellas)
Bill Gates dice que su fortuna le ha ayudado a alcanzar la felicidad, pero los científicos aseguran que no hace falta tener millones, y señalan alternativas al alcance de todos
![<p>Si el dinero compra o no la <strong><a href="https://elpais.com/tag/felicidad/a" target="_blank">felicidad</a></strong> es una de las grandes preguntas que solemos hacernos. Bill Gates, fundador de Microsoft y uno de los hombres más ricos del mundo, dijo hace unos meses que, en su caso, la fortuna sí le había hecho más feliz. "No tengo que pensar en lo que cuesta la salud o la universidad. Estar libre de las preocupaciones financieras es una verdadera bendición", <a href="https://www.cnbc.com/2019/02/25/bill-gates-says-wealth-made-him-happier-but-you-dont-need-a-billion.html" rel="nofollow" target="_blank">dijo el magnate</a>, según recogieron medios como la CNBC, aunque reconoce que tampoco es necesario tener miles de millones. </p> <p>En esta misma línea, como contamos en BUENAVIDA, <a href="https://elpais.com/elpais/2018/04/09/buenavida/1523289379_649830.html" target="_blank">la renta per cápita de un país está relacionada con el nivel de felicidad de sus ciudadanos</a>. Algo que se ve, sobre todo, en los países en vías de desarrollo: <strong>cuanto más aumenta su riqueza, más crece el nivel de felicidad de su población</strong>. Y la razón es sencilla, cuando las personas con menor capacidad económica ven aumentar sus ingresos, también ven cómo disminuyen sus preocupaciones.</p> <p>Sin embargo, distintos estudios han apuntado que <strong>si bien es importante tener una economía solvente, hay otras cosas que nos hacen más felices que el dinero</strong>. Repasamos lo que dice la ciencia al respecto.</p>](https://imagenes.elpais.com/resizer/v2/KF7JMSX4ERJLDLYS4XND7626FE.jpg?auth=1b218531927bd13d1600ffb4a1c1e60aa47e08e566c6d9406f1a756e09f917de&width=414)
Si el dinero compra o no la felicidad es una de las grandes preguntas que solemos hacernos. Bill Gates, fundador de Microsoft y uno de los hombres más ricos del mundo, dijo hace unos meses que, en su caso, la fortuna sí le había hecho más feliz. "No tengo que pensar en lo que cuesta la salud o la universidad. Estar libre de las preocupaciones financieras es una verdadera bendición", dijo el magnate, según recogieron medios como la CNBC, aunque reconoce que tampoco es necesario tener miles de millones.
En esta misma línea, como contamos en BUENAVIDA, la renta per cápita de un país está relacionada con el nivel de felicidad de sus ciudadanos. Algo que se ve, sobre todo, en los países en vías de desarrollo: cuanto más aumenta su riqueza, más crece el nivel de felicidad de su población. Y la razón es sencilla, cuando las personas con menor capacidad económica ven aumentar sus ingresos, también ven cómo disminuyen sus preocupaciones.
Sin embargo, distintos estudios han apuntado que si bien es importante tener una economía solvente, hay otras cosas que nos hacen más felices que el dinero. Repasamos lo que dice la ciencia al respecto.
![<p>El último ejemplo ha sido demostrado por investigadores de las universidades de Oxford (Reino Unido) y Yale (EE UU), y publicado en la revista <em>The Lancet</em>. Los expertos de estas instituciones recolectaron <a href="https://www.thelancet.com/journals/lanpsy/article/PIIS2215-0366(18)30227-X/fulltext#seccestitle10" rel="nofollow" target="_blank">datos sobre las costumbres de actividad física, los estados de ánimo y la situación económica</a> de más de un millón de estadounidenses. En el aspecto psicológico, les preguntaron cuántas veces se habían encontrado mal anímicamente en los últimos 30 días; y en el físico, se les pidió que eligiesen entre 75 tipos de actividades, desde cortar el césped hasta levantar pesas. Por último, se les pidió que comentasen cuáles eran sus ingresos anuales.</p> <p>Los científicos descubrieron que aquellos que tenían la costumbre de hacer ejercicio de forma regular solo se encontraban mal anímicamente unos 35 días al año. Una cifra que aumentaba hasta los 53 días en aquellas personas que no realizaban ningún tipo de esfuerzo. Además de tener menos días malos al año, <strong>las personas que se ejercitaban tendían a estar más alegres en general, tanto como aquellas que ganaban más dinero</strong>.</p>](https://imagenes.elpais.com/resizer/v2/65ZZXQ5CKFOWPHIIMLJHW2MBIM.jpg?auth=53e647dce75a76df7b2eda438ef99b19c79b653210de58d59b0918e229748ce7&width=414)
El último ejemplo ha sido demostrado por investigadores de las universidades de Oxford (Reino Unido) y Yale (EE UU), y publicado en la revista The Lancet. Los expertos de estas instituciones recolectaron datos sobre las costumbres de actividad física, los estados de ánimo y la situación económica de más de un millón de estadounidenses. En el aspecto psicológico, les preguntaron cuántas veces se habían encontrado mal anímicamente en los últimos 30 días; y en el físico, se les pidió que eligiesen entre 75 tipos de actividades, desde cortar el césped hasta levantar pesas. Por último, se les pidió que comentasen cuáles eran sus ingresos anuales.
Los científicos descubrieron que aquellos que tenían la costumbre de hacer ejercicio de forma regular solo se encontraban mal anímicamente unos 35 días al año. Una cifra que aumentaba hasta los 53 días en aquellas personas que no realizaban ningún tipo de esfuerzo. Además de tener menos días malos al año, las personas que se ejercitaban tendían a estar más alegres en general, tanto como aquellas que ganaban más dinero.
![<p>Además de sudar en un gimnasio, como contamos en BUENAVIDA, <a href="https://elpais.com/elpais/2016/11/15/buenavida/1479210663_012299.html" target="_blank">el tiempo es otro de los factores necesarios para ser felices</a> y, a pesar de que solemos creer lo contrario, nos hace alcanzar la anhelada alegría más que la fortuna. Es lo que concluyó un estudio publicado en la revista <em>Social Psychological and Personality Science,</em> en el que un 64% de los participantes declaró que prefería tener dinero. Sin embargo, <strong>aquellos que daban más importancia a disponer de tiempo resultaban ser más felices</strong>.</p> <p>Un trabajo de la Universidad de British Columbia en Vancouver (Canadá) demostró que valorar el tiempo sobre el dinero está asociado a mayores niveles de felicidad. <strong>El factor tiempo pasa a cobrar más importancia entre nuestras prioridades a medida que vamos envejeciendo</strong>. Tiene lógica: cada segundo que pasa se convierte en un bien más escaso.</p>](https://imagenes.elpais.com/resizer/v2/5K57KI7Y2FJ7PBQMOP3KSYDQVM.jpg?auth=ba2fb5189f3c32198663e92522befbcaaffc9717f91ec0ed9889da38be7a3195&width=414)
Además de sudar en un gimnasio, como contamos en BUENAVIDA, el tiempo es otro de los factores necesarios para ser felices y, a pesar de que solemos creer lo contrario, nos hace alcanzar la anhelada alegría más que la fortuna. Es lo que concluyó un estudio publicado en la revista Social Psychological and Personality Science, en el que un 64% de los participantes declaró que prefería tener dinero. Sin embargo, aquellos que daban más importancia a disponer de tiempo resultaban ser más felices.
Un trabajo de la Universidad de British Columbia en Vancouver (Canadá) demostró que valorar el tiempo sobre el dinero está asociado a mayores niveles de felicidad. El factor tiempo pasa a cobrar más importancia entre nuestras prioridades a medida que vamos envejeciendo. Tiene lógica: cada segundo que pasa se convierte en un bien más escaso.
![<p>Similar a la opinión de Bill Gates -que el dinero es necesario para ser feliz porque elimina preocupaciones- es la del psicólogo, profesor de la Universidad de Harvard y autor de <em>Tropezar con la felicidad</em> (Destino), Dan Gilbert, quien considera que hay una cifra máxima de la felicidad: 60.000 euros. Todas las ganancias extra son indiferentes, según su opinión. Más allá de tener una economía solvente, como contamos en BUENAVIDA, este experto explica que <a href="https://elpais.com/elpais/2018/10/18/buenavida/1539870402_805469.html" target="_blank">hay cosas que aportan mucha alegría sin necesidad de gastarse un duro</a>. En concreto, habla de <strong>cuatro actividades cotidianas: practicar sexo, escuchar música, hablar y, coincidiendo con el estudio de Yale y Oxford, hacer ejercicio</strong>.</p>](https://imagenes.elpais.com/resizer/v2/UMYCZJXAZFLFVKWXYWOWNJRZVU.jpg?auth=9fe3b7b609a86c43872d87bd1b14bdfbc79ed13d27f51c9051b3422b7e47524b&width=414)
Similar a la opinión de Bill Gates -que el dinero es necesario para ser feliz porque elimina preocupaciones- es la del psicólogo, profesor de la Universidad de Harvard y autor de Tropezar con la felicidad (Destino), Dan Gilbert, quien considera que hay una cifra máxima de la felicidad: 60.000 euros. Todas las ganancias extra son indiferentes, según su opinión. Más allá de tener una economía solvente, como contamos en BUENAVIDA, este experto explica que hay cosas que aportan mucha alegría sin necesidad de gastarse un duro. En concreto, habla de cuatro actividades cotidianas: practicar sexo, escuchar música, hablar y, coincidiendo con el estudio de Yale y Oxford, hacer ejercicio.
![<p>Y sobre encontrar la felicidad en la cotidianidad también ha hablado Dmitry Golubnichy, un experto en finanzas letón que ha escrito el libro <em>Sé feliz durante 100 días seguidos (Cúpula, 2019),</em> en el que recopila <a href="https://elpais.com/elpais/2019/02/08/buenavida/1549620367_735674.html" target="_blank">un centenar de pequeñas cosas que nos ayudan a mantener la sonrisa cada día</a>. Una de ellas, como contamos en BUENAVIDA, es la sencilla acción de morder un lápiz. Y, aunque pueda parecer simple, un estudio realizado por tres psicólogos de las universidades de Victoria (Nueva Zelanda) y Loyola (EE UU) ha avalado su técnica: "<strong>Saborear los pequeños momentos constituye un importante mecanismo a través del cual la gente puede destilar felicidad</strong>", dice su investigación.</p>](https://imagenes.elpais.com/resizer/v2/2BMF2VOI3RMHTJCEHACL7GQLCY.jpg?auth=0a84249cbf94ef15bb6810c9234e79c1e8d881d4bb6b485a20aa9dde2b7d550d&width=414)
Y sobre encontrar la felicidad en la cotidianidad también ha hablado Dmitry Golubnichy, un experto en finanzas letón que ha escrito el libro Sé feliz durante 100 días seguidos (Cúpula, 2019), en el que recopila un centenar de pequeñas cosas que nos ayudan a mantener la sonrisa cada día. Una de ellas, como contamos en BUENAVIDA, es la sencilla acción de morder un lápiz. Y, aunque pueda parecer simple, un estudio realizado por tres psicólogos de las universidades de Victoria (Nueva Zelanda) y Loyola (EE UU) ha avalado su técnica: "Saborear los pequeños momentos constituye un importante mecanismo a través del cual la gente puede destilar felicidad", dice su investigación.