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Reportaje:

El ocaso de la capital catalana del mueble

Las 50 principales empresas de La Sénia aplican suspensiones de empleo - El sector, líder español en exportaciones, se suma al bajón industrial del Ebro

El poder de arrastre de la construcción es contundente: la debacle del ladrillo ha tenido un duro impacto en la producción de cemento, en las ventas de pinturas, en la instalación de parqué... y también en la demanda de muebles. La industria catalana del mueble llora. Acusa a un tiempo el hundimiento de la construcción de viviendas -en Cataluña, las últimas cifras de 2009 de la Cámara de Contratistas dicen que se iniciaron un 58% menos que en 2008-, la creciente competencia del mueble barato -China supone ya una cuarta parte de las importaciones- y la atonía del consumo -que vuelca la escasa demanda en comercios como Ikea, por el tirón de los precios-. Los trabajadores del sector, repartidos entre pequeñas y medianas empresas fabricantes, protagonizan un goteo de despidos y, sobre todo, suspensiones de contratos.

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"Hoy no hay ninguna compañía de las 50 más importantes que no haya aplicado o aplique una suspensión de empleo en La Sènia", resume la situación, con confesada preocupación, Francesc Jornet, responsable del Metal y la Madera en las Tierras del Ebro de UGT de Cataluña. Algunos ejemplos: tras haber prescindido de 67 trabajadores, en 2009 Antaix aprobó una suspensión temporal de contratos para 224, durante 72 días. También ha pasado por un proceso similar Mobicenia, también en La Sénia, para medio centenar de empleados, y que no ha renovado contratos a eventuales. O Meseguer, con un expediente temporal para más de 30. La fábrica de Tresfor en Ulldecona ha sido barrida por la crisis.

La Sènia es el eje del principal foco industrial del mueble de los dos que tiene Cataluña: el Montsià -con los fabricantes en La Sènia, Ulldecona, Amposta y Santa Bàrbara- y el Vallès Oriental -con La Garriga y Granollers como epicentro-. Según el Observatorio de Prospectiva Industrial, en el Montsià había 117 empresas con 2.135 trabajadores en 2008, y en el Vallès Oriental, 107 compañías con 1.554 empleados. Esta crisis se agrava por el contagio del cierre de Lear, en la vecina Baix Ebre, por temor a la desertización. El antídoto del tripartito ha sido arañar del Ejecutivo central 10 millones para reindustrializar las Tierras del Ebro, más 1,1 millones específicos para potenciar el mueble, cuyo cluster (agrupación de empresas de un mismo sector en una zona que se junta para explotar sinergias) es uno de los que Innovación, Universidades y Empresa quería reforzar.

"El mueble no ha tocado fondo y si no se aplican medidas urgentes, tendremos un serio problema, un apuro gordo", añade Jornet, en alusión a la transformación de los ERE temporales en expedientes de extinción de empleos. El secretario general del sindicato, Josep Maria Álvarez, ha pedido al Gobierno catalán y al central la puesta en marcha de planes renove para el mueble y el equipamiento del hogar, "porque de esta crisis sólo saldremos estimulando el consumo". De él, añadió, dependen no sólo "más de 2.000 empleos sino la supervivencia de empresas en el Baix Ebre".

Cataluña es el segundo productor de España, sólo por detrás de la Comunidad Valenciana. Pero en 2009 lideró las exportaciones, al acaparar un 36,5%, frente al 20% de las valencianas, según los datos, hasta septiembre, de la patronal ANIEME. Las exportaciones catalanas arrastran una caída interanual del 11,3%, frente a la del 27,2% de los de la Comunidad Valenciana.

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