ELECCIONES EUROPEAS
| Las consecuencias de los resultados
Mariano Rajoy sigue fiel a su ritmo pausado. Ni siquiera en el momento de mayor euforia después de un año muy duro, el de la noche electoral de las europeas, se le vio perder los nervios. Tampoco ayer, al día siguiente, cuando convocó a su dirección con la victoria por casi cuatro puntos aún caliente.
"Sufrimos un moderado desgaste a causa de la crisis económica, pero no creo que lo ocurrido en las elecciones europeas condicione el futuro". Este es el análisis interno que realizó ayer, el día después de la derrota electoral, el secretario general del PSOE y presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, ante la ejecutiva de su partido.
La abismal diferencia de votos que los socialistas mantienen sobre el Partido Popular en Cataluña (18 puntos y 350.000 sufragios) no bastó esta vez para evitar la derrota del PSOE en el conjunto de España. El PSC celebró el resultado como una victoria pero las sonrisas de sus dirigentes fueron forzadas.
La consolidación al alza del voto de la izquierda abertzale en ausencia de violencia y el triunfo del PSE-EE en 10 de los 12 municipios más importantes del País Vasco han empañado la apurada victoria del PNV en las elecciones europeas y, complicado el proceso de su debate ideológico una vez perdido, de golpe, el Gobierno vasco y a su candidato más carismático, Juan José Ibarretxe.
Las elecciones europeas no son las mejores para extraer conclusiones firmes, porque en ellas, al no estar en juego ningún Gobierno propio y dada la lejanía con la que aún se ven las instituciones europeas, muchos ciudadanos votan para experimentar, otros para castigar, y la mayoría ni siquiera vota.
Los resultados de IU-ICV en estas elecciones europeas tienen una cara: es la primera vez desde 1996 que la formación no pierde representación en unos comicios, ha conservado los dos escaños en el Parlamento Europeo y ha mantenido el porcentaje de voto logrado en las generales del año pasado: 3,7%. Es decir, no ha seguido cayendo, se ha frenado.
El último jefe de ETA detenido, Jurdan Martitegi Lisaso, Arlas, tenía entre sus planes criminales matar a Baltasar Garzón con un veneno que iba a ser introducido en una botella de coñac de calidad que un falso admirador le iba a enviar como regalo al magistrado a la Audiencia Nacional, según fuentes de la lucha antiterrorista.
La Fiscalía de Granada ha pedido a la Audiencia Provincial que revoque la decisión del Juzgado de Instrucción 3 que rechazó asumir la exhumación de la fosa donde supuestamente yacen los restos de Federico García Lorca. La juez Aurora Fernández rehusó el pasado 29 de mayo hacerse cargo de la exhumación del maestro Dióscoro Galindo y el banderillero Francisco Galadí.
Momentos de pánico se vivieron la noche del domingo a las puertas del teatro Reina Victoria, en pleno centro de Madrid. Arndt Meyer, un hombre de 39 años, de nacionalidad alemana y con las facultades mentales supuestamente dañadas, intentó matar a la actriz Sara Casanovas, de 25 años. Para ello, la apuntó con una ballesta y disparó.